Se espera que las ventas sigan mostrando comportamientos dispares para lo que resta del año, por ejemplo, la venta de vehículos livianos sentiría el impacto del enfriamiento del consumo privado, informó la Asociación Automotriz del Perú (AAP).
La venta de vehículos livianos nuevos se situó en 13.202 unidades en septiembre del 2023, cayendo 11,2% respecto al mismo mes del año pasado, informó la Asociación Automotriz del Perú (AAP).
Durante los primeros 9 meses del año, se vendieron 127.891 vehículos, superando en 6,55% a lo reportado en similar periodo del 2022, desacelerándose desde el 9,1% observado el mes anterior.
Al desagregar la información, la comercialización de SUV, en lo que va del año, sumó 57.755 unidades, cifra mayor en 8,5% a nivel anual; mientras que la venta de pick up y furgonetas llegó a 24.904 unidades y la de camionetas a 18.208 unidades, avanzando 3,3% y 26,6%, respectivamente. Por último, la venta de automóviles cayó 4,6% a 27.023 unidades.
“La desaceleración en este mercado responde a la precarización del mercado laboral, el aumento del costo de vida y la confianza del consumidor que se mantiene en el tramo pesimista, que impactan el desempeño del consumo privado”, puntualizó Alberto Morisaki, gerente de Estudios Económicos y Estadística de la AAP.
Agregó que, para lo que resta del año, se espera que las ventas sigan mostrando comportamientos dispares. Por ejemplo, la venta de vehículos livianos sentiría el impacto del enfriamiento del consumo privado.
“Sin embargo, el efecto positivo generado en los últimos meses por la mayor disponibilidad de unidades nos permitirá cerrar el 2023 con una expansión”, manifestó.
Vehículos pesados
En lo que respecta a los vehículos pesados, la venta de camiones y tractocamiones avanzó a 1.349 unidades en septiembre (+1,8% a nivel interanual), mientras que entre enero y septiembre llegó a 11.179 unidades, descendiendo en 5,4% a tasa anual.
La comercialización de estas unidades registró su tercera alza interanual consecutiva gracias al vital apoyo de la actividad minera, la cual anota un desempeño positivo en lo que va del año; el mismo que ha atenuado parcialmente la menor demanda de sectores económicos como construcción, industria manufacturera, entre otros, seriamente afectados por el menor dinamismo de la economía.
Morisaki afirmó que la caída de la inversión privada y la continua incertidumbre sobre las expectativas empresariales seguirían pesando sobre este segmento, llevando a que termine el año con resultados negativos.
Minibús y ómnibus
Por su parte, la venta de minibús y ómnibus se situó en 170 unidades en septiembre, disminuyendo 20,9% con relación al mismo mes del año pasado; mientras que durante los primeros 9 meses de este año se comercializaron 1.702 vehículos, cifra inferior en 12% frente a igual periodo del año pasado.
Las ventas de vehículos en este segmento están muy por debajo de sus niveles previos a la pandemia, debido a una serie de factores que los han golpeado con mayor fiereza, entre ellos el mismo brote vírico, las protestas sociales, informalidad, la caída de la inversión privada, el azote de los fenómenos climatológicos que perjudican el normal tránsito de vehículos y los problemas financieros de algunas empresas de transporte urbano.
Vehículos menores
Finalmente, la venta de vehículos menores se situó en 28.212 unidades en septiembre último (-15,4% interanual), mientras que entre enero y setiembre se comercializaron 257.961 unidades, número menor en 8,3% respecto a igual periodo del 2022.
Por segmento, la venta de motos durante los primeros 9 meses llegó a 180.052 unidades (-8,5%) y la de trimotos fue de 77.909 unidades (-7,9%).
El desempeño de la comercialización de los referidos vehículos es influenciado por el proceso de normalización que atraviesa la demanda en dicho mercado, luego del significativo avance del 2021; además de la reducción de la capacidad adquisitiva de la población en un contexto de inflación alta, explicó Morisaki.
“De igual manera, la venta de vehículos menores también cerrará con una caída, debido a la menor demanda y reducción de la capacidad adquisitiva de las familias”, añadió.