
En España y Latinoamérica, miles de personas mayores de 55 años están demostrando que el talento, la experiencia y la pasión no tienen edad. Aunque tradicionalmente se ha asociado el emprendimiento con la juventud, los datos y las historias reflejan otra realidad.
En España, de las más de 500.000 startups que existen, un 14% están lideradas por personas de entre 55 y 64 años, según el GEM España. Además, el 35% de las nuevas empresas que se han consolidado en el mercado las han fundado emprendedores de esa franja de edad.
El fenómeno también está en pleno auge en América Latina, donde el autoempleo se ha convertido en una vía de progreso para muchas personas mayores. Ofelina González, una panameña de 62 años, es un claro ejemplo de cómo la madurez no es incompatible con la innovación. Con determinación, puso en marcha un negocio de fertilizantes orgánicos elaborados por ella misma a base de hongos. A pesar de los obstáculos – trámites burocráticos, falta de formación y escaso acceso a la financiación -, no se rindió. Gracias al apoyo de Microserfin, entidad de la Fundación Microfinanzas BBVA (FMBBVA) en Panamá, Ofelina ha logrado sacar adelante su empresa y se ha convertido en un referente para otras mujeres de su comunidad: “Lo que yo he aprendido quisiera que todas también lo aprendan. Mi sueño es que minimicen sus gastos de producción y que cada una empiece a hacer su cultivo sostenible”, cuenta.
La necesidad de seguir generando ingresos en la edad madura es una realidad creciente en la región. Se estima que, para 2030, el 16% de la población latinoamericana tendrá 60 años o más y esa cifra podría acercarse al 30% en 2060, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). Sin ahorros
suficientes ni sistemas de protección social sólidos, muchos adultos mayores ven en el emprendimiento una alternativa de sustento.
Consciente de este desafío, la FMBBVA ha desarrollado productos financieros y programas de formación dirigidos específicamente a este grupo. Javier M. Flores, director general de la fundación, explica: “Ayudamos a que los emprendedores mayores accedan a crédito y formación, especialmente en habilidades digitales. En 2024, nuestras entidades atendieron a más de 587.000 personas mayores de 60 años”.
En España, las mujeres con perfil senior, como Ofelina, también están al mando de pequeñas y medianas empresas. La edad promedio de las emprendedoras españolas se sitúa entre los 36 y los 45 años, y muchas de ellas apuestan por sectores relacionados con la sostenibilidad, el medioambiente y las energías verdes, según la Oficina Nacional de Emprendimiento.
A nivel global, la tendencia es clara. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que, para 2050, la población de personas mayores de 60 años se duplicará, alcanzando los 2.100 millones. Un futuro en el que el ‘talento silver’ será parte esencial de la economía global.
Sobre la Fundación Microfinanzas BBVA
La Fundación Microfinanzas BBVA es una entidad sin ánimo de lucro creada en 2007 por BBVA en el marco de su responsabilidad social corporativa, para apoyar, con una dotación de 200 millones de euros, a personas en vulnerabilidad que tienen pequeños negocios. Opera en cinco países de América Latina y desde su creación, sus entidades han apoyado a más de 6 millones de emprendedores de bajos recursos a través del desembolso de más de 21.000 millones de dólares. Les ofrece servicios financieros y no financieros, formación y acompañamiento adaptados a sus necesidades para que progresen sus negocios, sus familias y sus comunidades.