
Los precios del crudo se mostraron volátiles mientras los operadores seguían preocupados por la política de producción de la OPEP+ y reaccionaban a los datos de inventarios de crudo. La organización se dispone a acelerar los aumentos de producción, lo que aumenta los riesgos de exceso de oferta. En cambio, algunos productores estadounidenses están reduciendo las perforaciones, lo que podría ayudar a estabilizar los precios en cierta medida.
Al mismo tiempo, el último informe de la EIA mostró que los inventarios de crudo cayeron en 2,03 millones de barriles, ligeramente por encima de los 1,7 millones esperados, pero menos que la reducción de 2,7 millones de barriles de la semana anterior. Este descenso podría ayudar a sostener las expectativas de demanda.
Las importaciones de crudo repuntaron hasta los 6 millones de barriles diarios, lo que podría suponer un impulso para economías exportadoras de petróleo como México y Colombia si se mantiene la tendencia. Sin embargo, la media de cuatro semanas se mantuvo un 13,3% por debajo del año pasado. La atención del mercado se centra ahora en la próxima decisión de la Reserva Federal sobre los tipos de interés. Una postura moderada podría respaldar las perspectivas de crecimiento y demanda de petróleo