Uno de cada 4 peruanos se encuentra hoy en situación de pobreza, cinco puntos más que en el 2019. Además, solo el 29% de peruanos en zonas urbanas cuenta con un empleo formal, seis puntos menos que en el 2016, señala la encuesta elaborada con motivo de CADE 2022.
La ciudadanía está cada vez más insatisfecha con la situación del país, siendo algunos de los desencadenantes el entrampamiento entre el Ejecutivo y Legislativo, el deterioro de las instituciones, la calidad de los servicios públicos y la incertidumbre que limita la inversión privada, señaló el presidente ejecutivo de Ipsos Perú, Alfredo Torres.
«Solo el 3% de peruanos considera que el Perú está progresando, desde el 2012 esta percepción se redujo en 35 puntos», afirmó según una encuesta realizada con motivo de CADE 2022 durante la sesión «El Perú en emergencia».
Este espacio dio pie a la reflexión sobre el desmantelamiento del Estado y el punto de inflexión actual que vive el Perú, caracterizado por un deterioro acelerado de la institucionalidad, el Estado y la economía.
Esta sesión tuvo como expositores a Juan Fernando Correa, gerente de país del Grupo Falabella, Nuria Esparch, experta en políticas públicas y directora de HACER Consultores, Carmen McEvoy, presidenta del Consejo Directivo de Proética, y a, como conductor.
Torres expuso las siguientes cifras que revelan una situación preocupante:
- 1 de cada 4 peruanos se encuentra hoy en situación de pobreza, cinco puntos más que en el 2019.
- Solo 29% de peruanos en zonas urbanas cuenta con un empleo formal, seis puntos menos que en el 2016.
- Solo 27% de colegios cuenta con los tres servicios básicos completos, 17 puntos menos que en el 2016.
- Solo 7 de cada 10 niños menores de 3 años cuenta con esquema de vacunación completo.
- El 12,6% de peruanos ha sido víctima de un delito cometido con arma de fuego en los últimos 12 meses. La tasa de duplicó en 10 años.
- Perú se ubicó en 2021 en el puesto 71 de 167 países en el ranking de la democracia. Desde el 2020 retrocedió 14 puestos.
- Perú se ubicó en 2021 en el puesto 105 de 180 países en el Índice de percepción de corrupción. Desde el 2020 retrocedió 11 puestos.
Naturalmente, esta situación ha puesto al país en emergencia. Como afirmó Mc Evoy, la corrupción ha tenido un grave impacto en las instituciones y, como consecuencia, en las personas.
«Este país demanda a gritos un proyecto nacional que nos una en nuestra diversidad y a través del cual nos podamos respetar y escuchar. Esta no es una corrupción que nos ha caído como un meteorito, es una vieja corrupción. El Estado peruano ha sido un botín desde sus primeros años, entonces ahora estamos en una situación de parálisis del Estado», subrayó.
Gestión pública
Por su parte, Esparch opinó que esta situación afecta la gestión pública, así como la generación de oportunidades y calidad de vida de la población.
«Debemos tener claro que esta situación ya tiene 6 años. En lo que va del Gobierno ya tenemos 75 ministros. Esto genera una grandísima inestabilidad. La política pública tiene que atender al largo plazo. Estos golpes a la función pública están teniendo un efecto negativo sobre la gestión», señaló.
Inversión privada
Del lado empresarial, Correa compartió que este contexto de crisis y desconfianza hace caer la inversión privada.
«Las condiciones para la inversión requieren oportunidades, pero también reglas claras y predictibilidad en ellas y es algo que no tenemos porque tenemos un Ejecutivo que quiere cambiarlas reglas. Mientras exista esta premisa, va a ser muy difícil que haya inversión», dijo.
Es así como surgen reflexiones respecto a cómo afrontar los desafíos de unión, urgencia y acción desde el rol que tienen los distintos actores: políticos, empresarios, público, sociedad civil y ciudadanía.
Tender puentes
Torres señaló la necesidad de unión para tender puentes que ayuden a salir de la crisis actual e invitó a los panelistas a compartir sus apreciaciones.
En esa línea, Correa destacó, desde la visión empresarial, el reto del sector privado para continuar con la acción empresarial frente a esta situación.
«Los empresarios tenemos que entender que el Perú cambió. En primer lugar, tenemos que visualizar cómo impulsar un nuevo ciclo del país y tender puentes a las personas que lo necesitan y se sienten en abandono. Así demostramos como empresas privadas que las personas realmente nos importan», enfatizó.
Mc Evoy coincidió en la necesidad de imaginar un país de una manera diferente. «El primer paso es no establecer relaciones perversas con el Estado. Siempre ha habido este acercamiento equivocado de qué cosa podemos sacarle al Estado y no al revés, viendo cómo el Estado tiene que cambiar y proponiendo rutas alternativas», indicó.
Por su lado, Esparch ahondó en lo urgente de involucrarse y tender puentes para la unión. «Creo que nos está pasando factura no habernos involucrado en política por muchos años. Es importante que dejemos de invalidar al otro. Es un problema que tenemos que superar, así como la descalificación entre el Estado y los empresarios. Debemos promover espacios de conversación y de confianza para ponernos de acuerdo», enfatizó.
Llamado a la acción
Previo al cierre, se hizo un llamado a la acción para salir de la emergencia. Esparch incidió en la necesidad de tener funcionarios públicos capaces e invocó al empresariado a no invalidarlos.
Por su lado, Mc Evoy resaltó la importancia de tener una juventud comprometida con los problemas del Perú que se sume a la acción. A su vez, Correa, coincidió en la importancia de involucrarse. Añadió que es necesario repensar la actividad política y que las empresas, así como los jóvenes, deben participar activamente.
Lo compartido con los panelistas está alineado con los principios que promueve IPAE Acción Empresarial sobre la administración pública, eficaz y transparente y la democracia representativa, los cuales fomentan un estado capaz de regular eficazmente y proveer servicios de calidad en todo el territorio, así como impulsar una ciudadanía activa e informada. Como cierre a la sesión, se hizo un compromiso por la unión y la construcción de un mejor país para los jóvenes.