El Banco Central de Reserva (BCR), la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) y la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV) comparten sus visiones y proyectos en el desarrollo del sector fintech en Perú.
BCR
Afirma que su visión es tener en el mediano plazo un ecosistema de pagos digitales completo e interoperable que fomente la adopción masiva y el uso intensivo de los pagos en el país; donde la competencia entre los proveedores de los servicios de pago se lleve a cabo mediante la provisión de mejores servicios en un mercado amplio compuesto por los actuales y por nuevos participantes.
Con esta visión, el BCR ha elaborado una “Estrategia enfocada en la interoperabilidad de los servicios de pago”, que comprende cuatro líneas de acción: i) la interoperabilidad de las cuentas “bancarias”; ii) la interoperabilidad de los Códigos QR; iii) la interoperabilidad del dinero electrónico con las cuentas bancarias; y, iv) la interoperabilidad de nuevos actores como las fintech y bigtech.
La estrategia involucra el liderazgo regulatorio del BCR, en el marco del desarrollo de modelos de negocios por parte de los participantes que fomenten la innovación continua y la mejora permanente de la experiencia de usuario; todo esto, con la activa participación de todos los actores del mercado y la coordinación estrecha con la SBS. Como parte de esta estrategia, recientemente se emitió el Reglamento de Interoperabilidad de los Servicios de Pago que establece las condiciones y oportunidades para la interoperabilidad.
El reglamento comprende las dos primeras líneas de acción de la estrategia (cuentas bancarias y códigos QR) y tiene un amplio alcance (las entidades que actualmente proveen servicios de pagos minoristas inmediatos o en tiempo real).
Particularmente, el reglamento enfatiza la necesidad de generar la mejor experiencia de usuario posible y establece, para ello, lineamientos mínimos y obligatorios. Las dos últimas líneas de acción serán desarrolladas en el mediano plazo mediante cambios legales (en la Ley de Sistemas de Pagos, por ejemplo) y otras actividades que el BCR dará a conocer oportunamente al mercado. Asimismo, el BCR evalúa la implementación de su propia Plataforma de Pagos Minoristas para completar el ecosistema de pagos digitales cuando sea necesario.
SBS
En el último año, la SBS modificó la Ley General de Bancos a fin de facilitar el establecimiento en el país de entidades cuyas operaciones sean totalmente digitales; y crear una nueva licencia denominada Entidad de Crédito. Asimismo, realizó un estudio sobre dinero electrónico, implementó un Sandbox regulatorio y realizó varias modificaciones normativas que buscaron precisar las reglas existentes para el desarrollo y prueba de iniciativas innovadoras que no requieren de autorización previa.
Luego de todas las mejoras ya realizadas, la SBS afirma que entre los temas que requieren un mayor esfuerzo de análisis y coordinación, con los actores involucrados, se encuentra el Open Banking, proyecto que ejecuta con el BCR y para el cual cuenta con apoyo internacional. Asimismo, afirma que necesita conocer más las actividades asociadas a los activos virtuales y coordinar posibles medidas con otros reguladores, tema que requiere un mayor estudio. Finalmente, durante el año 2022, implementó una sección especialmente dedicada a fintech, en su portal institucional, la cual incluye un buzón de consultas especializado, abierto a los interesados en asuntos asociados a innovación financiera.
SMV
A la fecha, la SMV ha autorizado el funcionamiento de dos sociedades administradoras de plataformas de Financiamiento Participativo Financiero (FPF) y la organización de otras tres sociedades administradoras, dos de las cuales mantienen aún vigente el plazo de un año fijado en el Reglamento de la Actividad de FPF y sus Sociedades Administradoras para solicitar la respectiva autorización de funcionamiento.
Por otro lado, un reto importante para las entidades supervisadas, tales como los agentes de intermediación, fondos de inversión y fondos mutuos, ha sido el desarrollo de facilidades tecnológicas que les permita atender con fluidez a sus clientes, más aún ante la reciente coyuntura producida por la crisis sanitaria.
Así, la SMV identificó de manera conjunta con el mercado una serie de ajustes en la regulación que una vez materializados han facilitado el proceso de digitalización, con el fin de alcanzar procesos más eficientes que reviertan en un mejor servicio a los clientes y a su sostenibilidad, y así, continuar prestando sus servicios a través del uso de herramientas digitales.