Microfinanzas cumple 16 años. Parece que fue ayer cuando, el 12 de mayo del 2007, lanzamos el primer ejemplar impreso. No deja de sorprender cuánto ha crecido y se ha transformado el sector microfinanciero peruano desde entonces, y cómo lo hemos hecho nosotros también.
Como comunicador social, mi carrera profesional se había iniciado en el mundo de la publicidad, y se desarrollaba en un diario de circulación nacional. Sin embargo, el espíritu emprendedor siempre me ha acompañado, y ver permanentemente el frenesí de una redacción periodística, me hacía soñar con, algún día, liderar un proyecto similar.
Decidido a emprender un nuevo reto, la pregunta más difícil de responder era ¿en qué proyecto periodístico puedo incursionar y con quién? La respuesta no tardó en llegar, hacía 4 años que se había autorizado a las Cajas Municipales de Ahorro y Crédito (CMAC) a operar en áreas distintas de su ámbito de origen y éstas habían empezado a ingresar con fuerza a Lima desde el 2003, ofreciendo tasas de interés muy por encima de lo que ofrecían los bancos a los ahorristas y por depósitos por Compensación por Tiempo de Servicios (CTS). También habían empezado a llevar el microcrédito a sectores de la población en la capital a los que nunca se les había ofrecido uno.
Todos hablaban de ello, sin embargo, había mucha desconfianza de los ahorristas en depositar su dinero en estas instituciones financieras prácticamente desconocidas en Lima. No estaba lejano el recuerdo de la crisis financiera mundial del 2008 que había llevado a la quiebra e intervención de algunas instituciones financieras nacionales.
Solo las personas más informadas sabían que existía un Fondo de Seguros de Depósito (FSD) que protege el dinero de los ahorristas hasta cierto monto.
Si bien los diarios informaban sobre este proceso, no había una publicación que lo hiciera sobre cómo era el mundo microfinanciero por dentro y hacia dónde apuntaba. De pronto, ya tenía un proyecto periodístico, y también con quién hacerlo. El periodista César Sánchez, quien sería el primer director de Microfinanzas, a quien conocía, sabía del tema microfinanciero y estaba dispuesto a sumarse al proyecto. Ya podía dedicarme a buscar a los auspiciadores que estuvieran dispuestos a apostar por esta iniciativa.
Dicen que el comienzo de cualquier emprendimiento es duro, y este lo fue especialmente. Las microfinanzas no era un sector que estaba muy acostumbrado a verse bajo los reflectores del periodismo y, de pronto, no dejó de haber ni un solo evento, ni presentación, en los que no estuviera presente un periodista de Microfinanzas. Además, la revista también empezó a llegar a los todos actores de las microfinanzas del país quienes veían a la publicación con bastante extrañeza y desconfianza en un inicio.
Desde entonces, Microfinanzas comenzó a estar presente también en los principales eventos del sector, como el Seminario y el Congreso Internacional de Microfinanzas (SIM y CIM, respectivamente) organizados por la Federación Peruana de CMAC (FEPCMAC).
También empezó a cubrir eventos internacionales como el Foro Interamericano de la Microempresa (Foromic) y las asambleas de la Federación Latinoamericana de Banca (Felaban) y de la Asociación Latinoamericana de Instituciones Financieras (Alide), entre otros.
Es así como, con el transcurrir del tiempo, Microfinanzas se convirtió en el medio de comunicación de consulta obligatoria del sector, en su versión impresa en un primer momento, y después mediante la distribución gratuita de su versión digital, en PDF. El crecimiento también implicó el desarrollo del portal Microfinanzas.pe.
La llegada de la pandemia en el 2020 supuso nuevos retos. Se fortaleció su distribución digital y se apostó con mayor intensidad por redes sociales como Facebook, LinkedIn y Youtube, así como por el programa Microfinanzas TV conducido por Neisy Zegarra Jara. Ahora tenemos una importante presencia en redes sociales y todos nuestros productos periodísticos, en sus diferentes plataformas, cada día se posicionan mejor y ganan más seguidores.
La transformación digital en las finanzas también ha traído nuevos retos a Microfinanzas, y la gama de temas sobre los que informamos se ha ampliado enormemente, ello sin perder la esencia primigenia de la publicación.
Miramos con mucho optimismo el futuro de las microfinanzas, de su transformación tecnológica, de su apuesta por competir cada vez más, de igual a igual, con los grandes del sector.
También estamos convencidos de que la inclusión financiera es una herramienta fundamental para reducir la pobreza en el país y que en todo este proceso estaremos, en primera línea, apoyando con nuestra información para que este objetivo se haga realidad. Para la extensa familia de Microfinanzas, es decir, todos Uds., quienes nos leen y nos siguen, ¡Feliz Aniversario!