Caja Trujillo revisará y mejorará sus procesos internos para hacerlos más eficientes y rentables, lo que puede implicar la automatización de ciertas tareas, la reducción de costos operativos o la optimización de recursos humanos y tecnológicos, afirmó su gerente central de Administración y Finanzas, Eduardo Rojas Díaz.
Caja Trujillo implementará una serie de estrategias enfocadas en la eficiencia operativa, la digitalización y optimización de procesos, así como en la revisión de precios y admisión de clientes con calidad, con el fin de fortalecer sus niveles de rentabilidad, manifestó su gerente central de Administración y Finanzas, Eduardo Rojas Díaz.
Precisó que, en lo que respecta a la optimización de procesos y eficiencia operativa, Caja Trujillo revisará y mejorará sus procesos internos para hacerlos más eficientes y rentables, lo que puede implicar la automatización de ciertas tareas, la reducción de costos operativos o la optimización de recursos humanos y tecnológicos para maximizar la productividad.
Según la Superintendencia de Banca, Seguro y AFP (SBS), las utilidades de Caja Trujillo sufrieron una drástica disminución de 70,7%, pasando de S/44,7 millones en diciembre del 2022 a S/13 millones en el mismo mes del 2023.
Esta caída se reflejó también en los indicadores de rentabilidad, con el ROE (que mide la capacidad de una empresa para generar beneficios a partir del capital propio de sus accionistas) disminuyendo de 9,28% a 2,55%, y el ROA (mide la rentabilidad sobre el capital invertido) descendiendo de 1,66% a 0,41%.
Este deterioro en los indicadores de rentabilidad no es exclusivo de Caja Trujillo, ya que, en conjunto, el ROE de las 12 Cajas Municipales, incluida la Caja Metropolitanas de Lima, experimentaron una caída de 52,1% interanual, mientras que el ROA disminuyó 53,79%.
Endeudamiento
En cuanto a la estructura financiera de la entidad, a diciembre del 2023, Caja Trujillo comprometió el 84,62% de sus activos con deudas provenientes de terceros. Este mayor endeudamiento, según Rojas, responde a la creciente competencia en el mercado y a la flexibilización de ciertas políticas para brindar facilidades a los clientes.
“Caja Trujillo revisa constantemente sus políticas de admisión y monitorea los niveles de sobreendeudamiento para ser más cautos en la admisión de clientes y proteger así la cartera existente”, destacó.
En lo que respecta a la morosidad, Caja Trujillo registró un aumento de 5,01% a 5,61% entre diciembre del 2022 y diciembre del 2023, según datos de la SBS. Los créditos a medianas empresas presentaron los mayores niveles de morosidad, con una ratio de 11,93%, le sigue créditos a pequeña empresa con 6,17%, microempresa 5,37%, créditos hipotecarios 3,64% y créditos de consumo 3,29%.
Además, según la SBS, a diciembre del 2023, el 98,07% del total de créditos otorgados por Caja Trujillo fue mediante préstamos, mientras que el 0,99% se realizó mediante arrendamiento financiero y el 0,94% mediante créditos pignoraticios. En dicho mes, la cartera de créditos de la microfinanciera sumó S/2.787,9 millones.
Expectativas
En términos de expectativas, Rojas proyecta un crecimiento de 10% en la cartera de créditos de Caja Trujillo para finales de este año, sobre el total alcanzado en diciembre del 2023, que ascendió a S/2.787,9 millones. Este optimismo está respaldado por un crecimiento de 13,7% en la cartera de créditos entre diciembre del 2022 y diciembre del 2023.
No obstante, Rojas reconoció que el tema climatológico y la caída de la economía son los principales riesgos para el año en curso. “Es necesario que desde el Gobierno se implementen políticas efectivas para mitigar estos riesgos y garantizar la estabilidad financiera de la entidad en el futuro”, concluyó.