(*) Artículo publicado en la edición 221 de la revista Microfinanzas https://statuscomunicaciones.pe/microfinanzas/M221.pdf.
Este año, la campaña por el Día de la Madre comienza con un optimismo moderado. Hace unos días, en mi recorrido por el emporio comercial Mesa Redonda (en el centro de Lima) pude observar cómo clientes y comerciantes están preparando la mercadería que más se mueve en esta temporada.
Entre los productos utilitarios más vendidos, vi electrodomésticos pequeños, tazas serigrafiadas con mensajes alusivos y elementos decorativos en papel aluminio. Esta fecha es un día en el que buscamos reconocer la labor de las madres con un detalle o regalo simbólico de agradecimiento.
En Mesa Redonda, no solo encontramos comercios que realizan ventas directas a los clientes, sino también aquellos que despachan grandes cantidades de productos a otras zonas de Lima y a regiones. Desde mediados de abril, estos comerciantes observan cómo se va moviendo la demanda en sus negocios.
Además, consultan con sus clientes o compradores de otras zonas para estimar cuántos pedidos realizarán. Basándose en estos pronósticos, administran de manera más eficiente su capacidad de endeudamiento al solicitar créditos del sistema financiero y de proveedores.
Las ventas de esta campaña siguen la misma sintonía que la coyuntura económica. Por ello, existe una mayor cautela por parte de los emprendedores, sin lugar a duda. Siempre hay factores que preocupan y pueden llevar a paralizar algunas regiones y a reducir las expectativas.
Por ejemplo, un comerciante del sur del país podría optar por comprar una cantidad menor a su proveedor en comparación con el año pasado, o bien, podría pedirle que espere un poco para evaluar la reacción del mercado ante la campaña. Cada día es crucial para medir la temperatura de la campaña al momento.
Las micro y pequeñas empresas (Mypes) están a la espera de saber si podrán solicitar más créditos en caso de que la campaña se active y requieran mercadería adicional. Por otro lado, los bancos, Cajas y otras instituciones financieras, estamos listos para atender esa demanda. En esta situación, como banco, debemos estar cerca y atentos a una evolución positiva de la campaña, ya que las necesidades de los clientes pueden aumentar repentinamente y debemos atenderlas de inmediato. Y si las expectativas no mejoran, ofrecer la mejor asesoría sobre cómo proceder a partir de entonces. Estamos aquí en las buenas y en las malas.
La relación cercana entre una entidad financiera y su cliente es altamente valorada, especialmente en campañas tan significativas como la del Día de la Madre. Cuando los clientes reciben varias ofertas para tomar créditos, no necesariamente eligen la tasa más atractiva.
En cambio, su elección se basa en quién conoce su historia financiera, y, en algunos casos, incluso en la relación personal de años con su asesor de negocios. El Net Promoter Score (NPS), que permite medir la satisfacción del cliente y también la lealtad, se convierte así, en un indicador de gestión muy importante.
Para los emprendedores, lo ideal es comprometerse con un banco, y a lo sumo con 2. Si consideran trabajar con 3, podrían percibir que su orden financiero se ve afectado, a pesar de los diversos beneficios que se les ofrezcan.
En esta competencia, las campañas comerciales pueden marcar la diferencia al estrechar la relación con el cliente. Se pueden explorar diversos caminos para ofrecer facilidades, como disponer del dinero sin evaluaciones adicionales y a través de medios digitales.
En resumen, la campaña del Día de la Madre se perfila de manera similar a la del año pasado. Los emprendedores están midiendo de cerca cómo se mueve la demanda, y el sistema financiero está atento para responder de inmediato a estas necesidades.
Nos dirigimos hacia el segundo domingo de mayo, una fecha en la que, más allá de las cuestiones económicas, nunca debe faltar el amor y el reconocimiento hacia las madres.