Estudios internos realizados en algunas empresas dejan evidencia que la productividad mejoró en tiempos de pandemia.
Desde antes del covid-19 ya se hablaba de la remotización o trabajo flexible, pero la llegada de la pandemia obligó a muchas empresas -para asegurar la continuidad de operatividad- a derribar paradigmas, asimilar el aprendizaje y adaptarse rápidamente. En esa adaptación se realizaron cambios en diversos ámbitos, uno de ellos fue, cómo trabajábamos desde la casa
Cuando miramos los resultados, aprendimos que se puede trabajar de manera remota y que, en muchos casos, aumenta la productividad laboral. Tenemos evidencia de algunos clientes que han realizado estudios internos y nos dicen que, efectivamente su productividad mejoró en tiempos de pandemia. Claro que, si bien algunas personas se sienten más productivas, también hay riesgos que se deben controlar. Por ejemplo, hay personas que trabajan menos. Se sabe también que, el trabajo remoto ha generado mucho estrés en las mujeres, algunos estudios muestran cómo las mujeres salieron más perjudicadas con la pandemia versus los hombres, debido al cuidado de los hijos y del hogar, afectando el bienestar de las personas.
Una pregunta frecuente es ¿qué modelo de trabajo híbrido se debe implementar? No existe una receta única para todos en cuanto al modelo de trabajo híbrido, la medida dependerá de cada organización porque la remotización trae distintas formas de aplicación a distintos niveles. Una recomendación es capturar la experiencia que la organización tuvo durante la pandemia, qué funcionó bien, qué funcionó mal, los riesgos que hubo, cómo se manejó, esa es la línea básica.
Segundo, definir el potencial del trabajo híbrido para cada organización y acá es donde hay que considerar distintos formatos y alcances. ¿Será full oficina? ¿tendrá un formato híbrido planificado donde una semana sea de forma remota y otra presencial, mezcla de algunos días de la semana presencial con remoto? ¿Será un híbrido auto gestionado, donde cada gerente señale qué días irá su equipo a la oficina? ¿O será formato full teletrabajo?. Evaluando adecuadamente los costos y beneficios de las distintas opciones, se definirá cuál es el alcance de la remotización y potencial de trabajo híbrido particular para cada empresa.