Conviene optar por un depósito a plazo cuando se ha acopiado un monto determinado y no se piense tocar ese dinero por un tiempo determinado.
El depósito a plazo fijo es el producto que permite ahorrar en un periodo determinado de tiempo en un lugar seguro y rentable. Un depósito a plazo fijo paga más intereses que una cuenta de ahorros por lo general, pero a cambio debes estacionar tu dinero por un tiempo determinado.
Lo ideal para mantener el ahorro en un depósito a plazo fijo será en función de la necesidad del ahorrista, algunas personas no tocan esos fondos por algunos meses, otros por 1, 2 o 3 años, los plazos comerciales suelen llegar a 3 años, la mayoría lo desea en periodos de hasta 1 año.
Actualmente las entidades bancarias permiten pre cancelar antes del plazo de vencimiento, pero te calculan el pago de intereses a una tasa menor, por eso la disponibilidad no es un inconveniente, aunque hay una decisión a evaluar por los intereses que dejas de percibir.
Por ello conviene optar por un depósito a plazo cuando se ha acopiado un monto determinado (cuando menos el monto mínimo que pide la entidad) y no se vaya a tocar por un tiempo determinado. Actualmente se brindan opciones de depósitos a plazo que van desde los 30 días hasta los 3 años y en su mayoría optan por plazos de un año.
Algunas recomendaciones son:
1.- Evaluar la tasa es importante, de ello depende la rentabilidad, pero debes evaluar los indicadores de la entidad, un buen balance entre precio (tasa) y riesgo (indicadores).
2.- Tener en cuenta el tiempo por el que colocas los fondos, si resulta que debes retirarlo antes no ganaras los intereses esperados.
3.- Considerar la capilaridad o presencia de la entidad a nivel nacional y el entorno digital que mantiene, para que muevas los fondos de ser requeridos.
4.- Dividir el dinero en algunos depósitos como te permitan las condiciones, por ejemplo, si reuniste S/ 20,000.00 es preferible dos depósitos de S/ 10,000.00, pues si en el futuro debes pre cancelar alguno, solo afectas uno y no todo el importe.
La ventaja principal versus una cuenta de ahorros, es que el depósito a plazo paga un interés mayor al que paga una cuenta de ahorros, que la tasa pactada en un depósito a plazo no puede reducirse y tiene vigencia hasta el fin del periodo acordado, cosa que no necesariamente sucede con una cuenta de ahorros, donde existe la posibilidad de modificar la tasa siguiendo un procedimiento. Finalmente, en el depósito a plazo se tiene una barrera de disposición de los fondos hasta que culmine el periodo, salvo que se asuman las consecuencias y se recalcule la tasa a pagar por la precancelación.
Adicionalmente, otras ventajas que ofrece es que el cliente puede crear su depósito a plazo desde la comodidad de su casa, oficina o donde se encuentre. No se cobra comisión y contará con una tasa de interés preferencial. Así como absoluta seguridad y confidencialidad en sus operaciones y saldos.
La diferencia con un plan de ahorro es que esta herramienta es un mecanismo que te ayuda a ahorrar, incluso está automatizada en algunas entidades, la persona programa un ahorro de un monto determinado y cada vez que venza el periodo se carga y abona a otra cuenta.
El depósito a plazo es un producto que nace con un monto determinado, es decir el producto final del plan de ahorros sirve de insumo para el depósito a plazo.