
El dólar estadounidense amplió las pérdidas el martes, presionado por la escalada de las tensiones comerciales y el deterioro de la balanza comercial, que eclipsaron los recientes datos del PMI, mejores de lo esperado.
Esta fue la tercera sesión consecutiva de descensos, ya que los inversores reaccionaron al anuncio del presidente Trump de imponer un arancel del 100% a las películas extranjeras y su señal de próximos gravámenes a los productos farmacéuticos. Además, su confirmación de que no está prevista ninguna reunión con el presidente chino, Xi Jinping, esta semana redujo aún más las esperanzas de un avance a corto plazo en las negociaciones comerciales, lo que amplificó la preocupación por la estabilidad económica.
Mientras tanto, el déficit comercial de EE.UU. se amplió más de lo previsto en marzo, alcanzando los -140.500 millones de USD, frente a las expectativas de -137.000 millones de USD. El deterioro se vio impulsado por un aumento de las importaciones de bienes de consumo, posiblemente como reflejo de la concentración anticipada ante los nuevos aranceles. Junto con el descenso de las exportaciones de servicios, esta tendencia refuerza los temores de que los aranceles estén distorsionando los flujos comerciales y socavando la posición exterior de Estados Unidos.
De cara al futuro, la atención se centra en la decisión de política monetaria de la Reserva Federal y en la conferencia de prensa del presidente Powell. Aunque no se prevén cambios en los tipos, los inversores seguirán de cerca el tono y las orientaciones de la Fed. Actualmente, los mercados prevén tres recortes de 25 puntos básicos para finales de año, mientras que el dólar sigue siendo sensible a cualquier cambio en la trayectoria de la política monetaria