La inversión privada caería este año 7% debido a la fuerte disminución de la inversión minera en un 20%, y dejaría de caer en el 2024, estima Macroconsult. El BCR debería seguir bajando su tasa de interés para no ir contra la recuperación esperada del PBI, declara a Microfinanzas Elmer Cuba Bustinza.
La economía peruana cayó 0,58% entre enero y agosto del presente año, ¿cómo espera que cierre en el 2023?
Nuestra última estimación indica que ya estamos en negativo, el Producto Bruto Interno (PBI) caería este año 0,2%. Hemos ido ajustando a la baja esa proyección debido a que la agricultura se ha comportado peor de lo que esperábamos.
¿Qué esperaban para el agro este año?
Se preveía que iba a ser un mal año agrícola, pero que el segundo semestre sería mejor que el primero. Sin embargo, las cifras que se van adelantando indican lo contrario (el sector Agropecuario tiene una caída de 3,11% entre enero y agosto).
Volviendo al PBI, ¿cree que la economía peruana ya está en recesión?
Sí, estamos en recesión, pero se trata de un choque de oferta, no es una recesión por mayor caída de las expectativas y que por ello se tenga que responder con una política keynesiana (expansión fiscal).
¿A qué se refiere con choque de oferta?, ¿a las malas performances de agricultura y minería básicamente?
Me refiero a agricultura y pesca, que ya venían mal desde el 2022 por el impacto negativo de los factores climáticos, a lo cual se suma la crisis política del verano de este año que afectó la oferta; y, además, está el impacto del overshooting (sobrerreacción) en construcción.
¿Podría explicar esto último?
En el 2022 hubo récord histórico de crecimiento de la construcción debido a que mucha gente de sectores populares que retiró sus fondos de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) -retiros autorizados por leyes del Congreso que en total llegaron a casi el 0,9% del PBI- destinó parte de ellos a mejorar sus viviendas, ampliarlas o construir nuevas, por lo que comparado con ese resultado este año la construcción caería (según el BCR, cerraría en -3,7%).
Próximo año
¿Y cuáles son las perspectivas del PBI para el 2024?
Las proyecciones son positivas porque se espera que esos choques de oferta que hemos señalado se vayan desvaneciendo, a lo cual se suma el programa de inversión pública (Plan de Reactivación Económica) “Con Punche Perú”, del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), que involucra un impulso de alrededor de 1% del PBI.
En Macroconsult, estimamos que el PBI crecería 2% en el 2024 y podría tener un mejor resultado si el Gobierno logra un ambiente de estabilidad y saca adelante a las inversiones emblemáticas, inversiones por asociaciones público-privadas (APP), entre otras.
¿Cree que el choque político adverso que generó Pedro Castillo y que afectó a la economía del país ya pasó?, ¿cómo están las expectativas macroeconómicas?
Sí, la crisis que ponía en riesgo al régimen político ya pasó; si vemos la encuesta de expectativas macroeconómicas que elabora el BCR, estas han mejorado a 12 meses (las expectativas a 3 meses aun no mejoran porque se espera el impacto del Fenómeno de El Niño), lo cual habla de mejores perspectivas para la inversión.
Sin embargo, la crisis política estructural e institucional sigue; no tenemos partidos políticos fuertes, por ejemplo.
Inversión
En este contexto, ¿qué perspectivas ve para la inversión privada luego de haber caído más de 10% en el primer semestre?
Si lo vemos por sus componentes, la inversión minera obviamente va a caer, ello en gran parte porque todos los años no se puede tener un nuevo proyecto como Quellaveco.
La parte residencial (viviendas) de la inversión no minera también caerá, pero la inversión no minera corporativa, la inversión empresarial, caería muy poco este año.
¿Y en cuánto caería la inversión privada este año?
Estimamos que la inversión privada caería este año 7% (el BCR estima un –5,3%) porque detrás de ello está la inversión minera que caería un 20%.
La inversión en construcción caería también 7%, mientras que la inversión corporativa caería 2%.
¿Y cómo le irá a la inversión privada en el 2024?
Para el 2024 esperamos un repunte de la inversión privada; primero, porque la inversión minera dejaría de caer (ya sin la comparación con Quellaveco), la construcción también se estabilizaría y la inversión corporativa seguirá mejorando en la medida de que el Gobierno de Dina Boluarte se estabilice.
Estimamos que la inversión privada dejaría de caer en el 2024 (crecimiento 0%), lo cual ya sería un resultado positivo (el BCR estima un crecimiento de 1,8%).
¿Y la inversión pública? El BCR estima un crecimiento de 1,5% para este año…
Este año ha mejorado por el esfuerzo del MEF, pero no está recuperándose mucho (al primer semestre creció 2,1%, según el BCR) por el rezago de la inversión regional.
Al cierre de este año debería registrar un ligero crecimiento o un 0%, y en el 2024 debería crecer.
Empleo
Con el mal estado actual de la inversión, al empleo no le debe estar yendo bien, ¿cómo está el panorama en este aspecto?
El empleo total general no está cayendo debido a que el peruano siempre se la busca, pero sí cae el salario real precisamente para absorber la mayor oferta laboral.
Lo que está creciendo más es el empleo precario, el informal y los independientes.
¿Qué perspectivas ve para el empleo en el 2024?
El próximo año debe mejorar el empleo formal debido a las mejores perspectivas que se ven para la inversión, a diferencia de este año cuando casi toda la creación de empleo nuevo es informal.
Eso lleva al tema del consumo privado. Vemos que está creciendo muy poco este año, 0,2% al primer semestre y crecería 1,2% para el año según estima el BCR. ¿Qué perspectivas ve para esta variable?
El consumo privado total está creciendo muy poco, pero más importante es el reacomodo que está habiendo en la canasta de consumo; el gasto se está reorientando hacia alimentos debido al alza de los precios (inflación general).
Mientras que, por el otro lado, cae el consumo de otros bienes, principalmente de bienes duraderos para el hogar (electrodomésticos, por ejemplo), incluso los bienes destinados a la autoconstrucción.
Política monetaria
La tasa de inflación anual ha ido cayendo en este año, en diciembre del 2022 fue 8,46% y en septiembre bajó a 5,04%. ¿Cuál es la perspectiva de los precios?
Después de los impactos negativos de los precios del petróleo, los granos y del dólar a nivel internacional, la inflación interna ha venido en reversa, ya dejamos niveles de 8% (que se prolongó por 15 meses) y ahora estamos en una nueva meseta de 5% anual. A ese ritmo, a fines de este año la inflación estaría en 4%.
Espero que las expectativas de inflación se estabilicen en 3% y que la inflación observada entre a un 3% en el próximo verano y que durante el 2024 ingrese al rango meta del BCR (de entre 1% y 3%).
¿Eso debería llevar a que el BCR continúe disminuyendo su tasa de interés de referencia luego de que en octubre la redujo a 7,25%, por segundo mes consecutivo, tras mantenerla en 7,75% entre febrero y agosto?
Sí, claro. Debería continuar bajando en lo que resta del presente año porque si la tasa del BCR se mantuviera alta, en el contexto actual de tendencia a estabilización de la inflación, podría ir en contra de la recuperación de la economía, del rebote del PBI.
El dólar ha tenido una apreciación en los últimos meses. ¿Qué espera para el cierre de este año y para el 2024?
La Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos se ha comportado de manera más dura de lo que se esperaba y ha anunciado que su tasa de interés se mantendrá por más tiempo en el nivel en el que está o, incluso, podría subir debido a que la inflación esperada a 12 meses (3,4%) en Estados Unidos es mayor que la actual (3,2%).
Si es así, y como los países emergentes como Perú ya empiezan a bajar sus tasas de interés referenciales, saldrían capitales de corto plazo del país por el diferencial de tasas que se generaría, con lo cual se vería una depreciación del sol respecto al dólar.
Hoy el tipo de cambio en Perú está en alrededor de S/3,80. ¿En cuánto estaría a fin de año?
Espero que se mantenga en ese nivel de 3,80%, con presiones al alza, pero con el BCR interviniendo en el mercado cambiario para evitar los efectos que esa devaluación podría tener en la inflación interna.
Para el 2024, en gran parte del año, también esperaría cierta presión al alza del tipo de cambio porque el BCR seguiría bajando su tasa de interés antes que la Fed, pero con un precio estable por las intervenciones de compras de dólares del BCR. Hacia finales del 2024 sí esperaría que el dólar empiece a bajar.
Crédito
Hoy los bancos más grandes pagan hasta 8,5% por depósitos a plazo fijo. ¿Se mantendrán esas tasas?
Esas tasas están reflejando la postura actual del BCR, pero en la medida que esta entidad continúe bajando su tasa de interés referencial, esas tasas deben empezar a caer, igual que las tasas activas (de los créditos), sobre todo de los créditos corporativos (a empresas grandes).
¿Cuál es el panorama del costo del crédito para las empresas?
Toda la estructura de tasas de interés se fue hacia arriba, tanto las tasas a corto plazo como las de largo plazo, las del crédito hipotecario y las de consumo.
Dichas tasas deben bajar de acá a fin de año y, en el 2024, seguirían bajando ‘pari passu’ (en igual proporción) a medida que el BCR baje su tasa de interés de referencia.
¿Ve problemas para el crédito bancario en el país este año y el próximo?
No, los problemas que hay son de algunos atrasos en pagos, de morosidad, porque la economía está estancada.
Para el 2024 se espera un año mejor en este aspecto porque habría más crecimiento, menores tasas de interés y más empleo (lo que impulsa los créditos de consumo e hipotecario).
La cartera morosa de créditos ha subido este año, ¿qué se puede esperar para el 2024? ¿Hay riesgo de incumplimiento de pagos?
Se podrían dar problemas en algunas instituciones más pequeñas de créditos, como el microcrédito regional, rural, pero el MEF ha organizado para eso programas de fortalecimiento patrimonial.
Se podría esperar también algunas fusiones de esas entidades pequeñas, pero no se ve que vaya a haber crisis para el sistema bancario.
Riesgos
¿Qué riesgos más graves ve para la economía peruana en lo que resta de este año y para el 2024?
El riesgo más grave para la economía es no asegurar un rebote (repunte) del crecimiento del PBI a un 4%, digamos, y que nos quedemos con un crecimiento a una tasa baja y plana por malas señales políticas.
La falta de crecimiento del producto (y del empleo) lleva a mucho malestar en las ciudades, aumento de la pobreza y del desempleo, lo cual puede afectar severamente la gobernabilidad.
Estamos condenados a crecer para mantener la estabilidad democrática. Hay que recordar que Castillo salió elegido por el gran malestar post COVID-19 que había en la población.
¿El Niño no es un riesgo grave?
El Niño ya impactó, ya estamos con este fenómeno encima, ya afectó al agro. Pero su efecto destructivo sobre la infraestructura (vial y proyectos de construcción de carreteras, etc.) está por verse en diciembre y en el verano próximo. El Niño tiene 2 efectos: sobre el PBI (efecto flujo, que ya está ocurriendo) y sobre la infraestructura (efecto stock).
Los precios de los alimentos siguen subiendo, ¿no es ese otro riesgo?
Los precios de los alimentos ya subieron por el encarecimiento de la urea y los problemas que tuvo el Gobierno para garantizar su abastecimiento. Por el impacto de El Niño algunos precios de alimentos agrícolas podrían incrementarse en el verano y eso afectaría la inflación. En cambio, el precio promedio de los granos importados está por debajo del promedio del 2022 y no deberían afectar a la inflación.
En resumen, ¿podemos ver con optimismo el próximo año?
Digamos que en este momento estamos en la peor parte del año, con un PBI cayendo 0,8% en el tercer trimestre, y las perspectivas son de un rebote, de una recuperación como hemos señalado.
El gran riesgo es político, que haga que no se logre que el crecimiento del PBI repunte en el 2024.