Modelo de interoperabilidad se perfila como un modelo exportable, ya que su arquitectura novedosa ha llamado la atención de la región.
La Cámara de Compensación Electrónica (CCE) anunció que todo quedo listo para que las entidades financieras que forman parte de su ecosistema y los códigos QR sean interoperables, siguiendo la regulación establecida por el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP). Este desarrollo se suma a la ya existente interoperabilidad entre las billeteras electrónicas y marca un hito en el camino hacia las transferencias en tiempo real en el país, con un crecimiento proyectado hasta el año 2027.
La CCE trabajó en estrecha colaboración con los actores del sistema financiero peruano para implementar un modelo de interoperabilidad que se adapta a las necesidades locales y que, debido a su innovadora arquitectura, está atrayendo la atención de la región. Este enfoque no solo mejora la competitividad, sino que también amplía las posibilidades de uso de los pagos entre personas (P2P) y pagos a comercios (P2M) con una mínima fricción.
Los pagos digitales y las transferencias interbancarias son componentes fundamentales de la economía peruana actual, y esta medida responde a los desafíos y necesidades que plantea la inclusión financiera en el país.
Con el respaldo del BCRP como regulador, se busca allanar el camino para facilitar la conectividad entre todos los actores, tanto tradicionales como no tradicionales, lo que abre un abanico de oportunidades en los pagos y las transacciones.
“El gran reto a futuro es el de integrar el mundo bancarizado con el no bancarizado, sobre todo en un país como el Perú, donde el ratio de bancarización es muy bajo” afirmó Martín Santa María, Gerente General de la CCE.
Asimismo, “apuntando hacia la inclusión financiera, la interoperabilidad como mecanismo integrador de diferentes soluciones digitales, permite el uso de diversas aplicaciones para conectar financieramente a las personas y otros agentes del mercado en tiempo real y sin limitaciones físicas y costos asociados a los procesos presenciales”, puntualizó Santa María.