“Aquellas instituciones que logren integrar eficientemente la tecnología en su modelo de negocio estarán mejor posicionadas para enfrentar los desafíos del entorno y aprovechar las oportunidades de crecimiento”.
(*) Artículo publicado en la edición 229 de la revista Microfinanzas https://statuscomunicaciones.pe/microfinanzas/M229.pdf.
En el Perú, el sector de las microfinanzas es un motor de desarrollo que diariamente impulsa a miles de emprendedores y microempresas. Estas unidades productivas, que en su mayoría operan en la informalidad y carecen de acceso al sistema financiero tradicional, encuentran en las instituciones especializadas en microfinanzas (IMFs) un aliado estratégico para su crecimiento.
Sin embargo, en los últimos cinco años, el sector ha enfrentado importantes desafíos estructurales. La abrupta subida de la tasa de referencia ha incrementado los costos financieros, mientras que la inflación ha comprimido los márgenes de los pequeños y medianos negocios. A esto se suman los riesgos derivados de un entorno volátil: protestas sociales en 2022, fenómenos meteorológicos en 2023 y un panorama político y económico incierto. Estas circunstancias han afectado la capacidad de pago de los clientes, eliminado negocios y reducido el dinamismo económico, generando un aumento del riesgo crediticio.
Ante este panorama, la tecnología ha emergido como una herramienta indispensable para que las IMFs se adapten y continúen creciendo de manera sostenible. La implementación de soluciones tecnológicas, especialmente basadas en inteligencia artificial (IA), está transformando al sector en varios niveles.
La revolución tecnológica en las microfinanzas
Una de las mayores ventajas de la IA es su capacidad para procesar grandes volúmenes de datos, lo que permite personalizar la oferta de productos financieros de forma más precisa y eficiente. Los algoritmos de IA pueden analizar patrones de comportamiento de los clientes, predecir su capacidad de pago y ajustar las condiciones crediticias según sus necesidades específicas. Este enfoque no solo mejora la gestión del riesgo crediticio, sino que optimiza los procesos comerciales, aumentando la efectividad y la satisfacción del cliente.
Por otro lado, el modelo de negocio de las IMFs, tradicionalmente basado en una red intensiva de agencias y asesores, también puede beneficiarse enormemente de la tecnología. La IA permite automatizar tareas operativas repetitivas, liberando tiempo para que los asesores se concentren en actividades de mayor valor, como la construcción de relaciones de confianza con los clientes. Este enfoque no solo incrementa la productividad interna, sino que refuerza el compromiso y la fidelidad del cliente hacia la institución.
Hacia una mayor inclusión financiera
Un aspecto crítico donde la IA puede marcar una diferencia radical es en la inclusión financiera. Hoy en día, alrededor de 4 MM de microempresarios permanece excluido del sistema financiero por la falta de información que dificulta su localización y evaluación. Las herramientas tecnológicas pueden identificar, analizar y acercar propuestas de valor a estos segmentos desatendidos, expandiendo significativamente el alcance del sector de microfinanzas.
Un futuro más competitivo y sostenible
La adopción progresiva de tecnologías avanzadas no es solo una tendencia, sino una necesidad para quienes deseen mantenerse competitivos en este mercado. Aquellas instituciones que logren integrar eficientemente la tecnología en su modelo de negocio estarán mejor posicionadas para enfrentar los desafíos del entorno y aprovechar las oportunidades de crecimiento.
En conclusión, el sector de las microfinanzas en el Perú tiene ante sí la oportunidad de evolucionar hacia un modelo más eficiente, inclusivo y adaptado a las necesidades de sus clientes. La tecnología, en particular la inteligencia artificial, es la clave para construir esta transformación y consolidar una ventaja competitiva sostenible en un mercado en constante cambio. Quien logre dominar estas herramientas dará un salto cuántico hacia el liderazgo del sector.