La entidad ha implementado un plan agresivo de cobranza, combinando herramientas como reprogramaciones y refinanciamientos, con el objetivo de aliviar la carga de sus clientes y evitar procesos judiciales. La medida le está dando resultados favorables, afirma Javier Bereche, presidente del directorio de Caja Piura.
(*) Artículo publicado en la edición 229 de la revista Microfinanzas https://statuscomunicaciones.pe/microfinanzas/M229.pdf.
¿Cuáles fueron los principales motivos que llevaron a Caja Piura a absorber a Caja Sullana?
Nuestro objetivo a largo plazo es el crecimiento. Durante años hemos crecido orgánicamente, capitalizando nuestras utilidades y obteniendo resultados a partir de nuestra propia operación. Sin embargo, identificamos una oportunidad para acelerar ese crecimiento mediante la absorción del bloque patrimonial de Caja Sullana.
Esta decisión nos permitió aumentar nuestra operación en un 30% en términos de cartera de depósitos y número de clientes. Antes de esta absorción, contábamos con 2 millones de clientes, y ahora hemos alcanzado los 2,8 millones.
¿Cuáles fueron los principales retos relacionados con la absorción del bloque patrimonial de Caja Sullana?
En este tipo de operaciones, el principal desafío es siempre la cartera de créditos. Por ello, nuestra primera acción fue identificar las áreas de mayor riesgo en los pagos y aislarlas. A esa cartera se le realizó un saldo independiente y se diseñaron estrategias de cobranza específicas, como refinanciamientos o reprogramaciones, para atender las necesidades particulares de esos clientes.
Además, heredamos desafíos financieros, como el costo elevado de las tasas de captación que Caja Sullana utilizó para atraer depósitos. Nuestra prioridad fue ajustar estas tasas a valores de mercado. Gracias a la fortaleza financiera de Caja Piura, hemos podido cubrir esos costos y renovar depósitos, CTS y plazos fijos en condiciones competitivas para el sector.
¿Al absorber los activos y pasivos de Caja Sullana, respetaron las condiciones originales de los depósitos e intereses de los clientes?
Sí, hemos respetado completamente las condiciones originales establecidas por Caja Sullana, tanto para colocaciones como para captaciones. En muchos casos, incluso hemos renovado créditos y depósitos con las mismas tasas. Si identificamos que un cliente tiene un buen comportamiento financiero, le mantendremos condiciones favorables.
Cuando la SBS intervino Caja Sullana, el ratio de morosidad de su cartera era del 18%. ¿Cómo está funcionando su estrategia para recuperar esos créditos atrasados? ¿Qué resultados han logrado hasta ahora?
Adquirimos una cartera total de 2,000 millones de soles, de los cuales 393 millones ya estaban provisionados por la SBS, lo que significa que ese monto no impacta directamente en nuestros gastos. Esto nos dejó con una cartera efectiva de aproximadamente 1,600 millones de soles.
Hasta el momento, hemos recuperado 600 millones de soles, lo cual es un avance significativo. Nos queda un saldo de 1,000 millones que seguimos gestionando activamente. Para ello, hemos implementado estrategias como reprogramaciones y facilidades adicionales, especialmente considerando que la intervención de la SBS generó confusión entre los clientes, muchos de los cuales pensaron que sus créditos estaban congelados o no sabían a quién pagar.
En líneas generales, recuperamos aproximadamente 6 millones de soles por día de la cartera atrasada del bloque patrimonial adquirido a Sullana.
¿Cuántos clientes de riesgo tienen identificados actualmente y cómo están trabajando con ellos?
Actualmente, el bolso de clientes con atrasos en sus pagos incluye a 100.000 personas, quienes mantienen créditos por aproximadamente 200 millones de soles. Para atender esta situación, hemos creado unidades de cobranzas especiales que realizan visitas personalizadas. El objetivo es entender sus necesidades, apoyarlos y trabajar en la recuperación de esos créditos.
Se menciona en algunos medios que el plazo de gracia ofrecido a la nueva cartera de clientes venció en septiembre. ¿Es cierto?
No hemos ofrecido ningún período de gracia. Los créditos heredados de Caja Sullana continúan “vivos”, respetando las mismas condiciones originales: cronogramas, plazos y tasas. Sin embargo, entendemos que hubo confusión entre algunos clientes, quienes asumieron que sus créditos estaban congelados. Para ellos, estamos ofreciendo reprogramaciones e incluso refinanciamiento, brindándoles todas las facilidades para que puedan regularizar sus pagos.
Estados financieros
Respecto a los S/ 202 millones que Caja Sullana recibió del programa de Fortalecimiento Patrimonial, las disposiciones de la SBS les permiten emitir deuda subordinada con COFIDE. ¿Ya han incorporado ese pasivo en su saldo?
Aún no hemos consolidado saldos. Estamos en un proceso de migración y consolidación contable, ya que Caja Sullana utilizaba un sistema alquilado, mientras que Caja Piura opera con un sistema propio. Esto ha complicado la integración contable.
Una vez culminamos la valorización de la cartera y la migración de datos, consolidaremos los saldos financieros, incluyendo la deuda subordinada que heredamos de Caja Sullana. Hemos mantenido conversaciones con COFIDE y honraremos los plazos acordados una vez que el proceso esté finalizado. Es importante destacar que al ser una deuda subordinada, también fortalece nuestro ratio de capital global, lo que contribuye a la solidez financiera de Caja Piura.
¿Por qué aún no se refleja en los reportes de indicadores financieros publicados por la SBS el impacto de los activos y pasivos de Caja Piura tras absorber a Caja Sullana?
La compra de un bloque patrimonial requiere una valorización precisa realizada por una empresa auditora. En este caso, se contrató una firma auditora en conjunto entre la SBS y Caja Piura.
Esta firma ya inició su trabajo y se espera que entregue el informe final en diciembre. Con ese informe, podremos consolidar los saldos financieros, ya que la valorización de activos y pasivos adquiridos es fundamental para realizar los asientos contables correspondientes.
¿Significa que en diciembre será visible el impacto completo de la absorción en los indicadores financieros de Caja Piura?
En diciembre probablemente reflejaremos alrededor del 60% del impacto, que es lo que ya hemos migrado a nuestros sistemas. Semanalmente continuamos cargando más información en el proceso de migración.
¿Cuándo completarán todo el proceso de integración financiera y contable?
Nuestro objetivo es concluir la integración contable al cierre del año. Sin embargo, si no logramos finalizar al 100%, trabajaremos con las partes proporcionales migradas y completaremos la integración a más tardar en marzo de 2025. Sería ideal cerrar el año con todo consolidado para empezar el próximo ejercicio con los balances totalmente integrados, pero estamos preparados para ajustar los tiempos si fuera necesario.
¿La integración contable podría generar un aumento en sus provisiones?
Si identificamos un posible deterioro en la cartera de riesgo, ajustaremos las provisiones. Sin embargo, Caja Piura ha implementado provisiones voluntarias desde hace tiempo, lo que nos ha permitido tener más del 100% de la cartera de alto riesgo provisionada. Esto nos da un margen de acción sólido. Si la nueva cartera adquirida requiere provisiones adicionales, las realizaremos, pero esa sería nuestra última opción, ya que estamos aplicando estrategias enfocadas en la recuperación de deuda.
¿En qué consisten estas estrategias para recuperar cartera?
Hemos implementado un proceso agresivo de cobranza y de relación con los clientes. Esto incluye ofrecer herramientas como reprogramaciones y refinanciamientos para que puedan regularizar sus pagos. La idea es evitar llegar a un proceso de cobranza perjudicial o judicial, que es algo que no queremos ni para el cliente ni para la institución.
Programas de Vivienda
¿Cómo evalúa el desempeño de Caja Piura durante este año?
Tras la operación de absorción de Caja Sullana, hemos dado un salto importante. Ahora estamos disputando el primer lugar en captación de depósitos, compitiendo mes a mes. En colocaciones, nos encontramos entre el segundo y tercer lugar, lo cual también es significativo considerando que en el último año la colocación de créditos en el Perú se ha ralentizado.
¿Qué factores han influido en la ralentización de las colocaciones?
Hemos observado que la demanda por créditos de consumo, como tarjetas de crédito, ha disminuido, mientras que los clientes están priorizando créditos orientados a capital de trabajo y fondos sociales.
Además, hemos identificado un interés creciente en créditos hipotecarios, específicamente en programas como Techo Propio y MiVivienda.
¿Qué estrategia están implementando para atender esta demanda de créditos hipotecarios?
Estamos en proceso de crear áreas especializadas en Techo Propio y MiVivienda. Gracias a nuestros excedentes de liquidez, podemos financiar proyectos orientados al fondo social, pero lo hacemos con un enfoque estratégico y de negocio. Estos proyectos no solo benefician a las familias al facilitarles el acceso a vivienda, sino que también dinamizan la economía regional, lo que genera un círculo virtuoso: se reactiva la economía, surgen subcontrataciones y, a su vez, nuevos clientes para nosotros.
¿Cómo están asegurando la transparencia y el buen manejo en estos proyectos?
Hemos contratado a los mejores especialistas de los programas Techo Propio y Mivivienda del país, personas con experiencia probada y con un enfoque en la transparencia. Somos conscientes de que este sector ha estado afectado por casos de corrupción en años recientes, por lo que hemos tomado todas las medidas para evitar cualquier irregularidad. La responsabilidad es clave en esta etapa, y estamos formando equipos sólidos para liderar las nuevas áreas.
¿Cuándo esperan lanzar estos productos al mercado?
Si todo marcha según lo planificado, el próximo enero estaremos lanzando los productos de Techo Propio y MiVivienda. Nuestra intención es brindar una opción accesible y confiable para los peruanos que buscan cumplir el sueño de la casa propia.
Respecto a los créditos hipotecarios que lanzarán, ¿Qué monto promedio estiman para los desembolsos?
En el caso de los créditos bajo los programas Techo Propio y MiVivienda, el Estado asume aproximadamente S/ 46,000 como subsidio. Considerando que una vivienda o módulo social tiene un costo promedio de S/ 80,000, Caja Piura prestaría a sus clientes alrededor de S/ 34,000 por crédito.
¿Cuánto dinero destinarán específicamente para los créditos de vivienda social?
Nuestro presupuesto global para todos los productos financieros es de S/ 1,000 millones. La asignación para vivienda social dependerá de la evaluación de los proyectos inmobiliarios, de las empresas que los ejecuten y de las regiones donde se desarrollen. No se trata solo de otorgar un crédito hipotecario, sino también de contribuir a la reactivación económica regional mediante capital de trabajo.
Microcréditos
¿Qué nuevo producto han lanzado este año?
Hemos identificado un uso creciente de los créditos informales, conocidos como gota a gota, que ya mueven más de S/ 1,700 millones anuales en el Perú. Estos préstamos, aunque accesibles, conllevan serios riesgos como extorsión, amenazas y violencia. En respuesta, lanzamos un microcrédito diseñado para quienes necesitan montos pequeños y plazos cortos de devolución.
Este producto tiene un plazo promedio de 30 días, con un ticket promedio entre S/ 500 y S/ 1,000. A diferencia de los préstamos tradicionales, que suelen tener plazos de uno a tres años, este microcrédito ofrece rapidez y flexibilidad. En el primer mes de lanzamiento, octubre, logramos colocar S/ 150 millones, y desde entonces el dinamismo de estos créditos ha continuado en aumento. Celebramos esta acogida porque significa que más personas están optando por soluciones financieras formales en lugar de acudir al peligroso mercado informal.
El norte del país enfrenta desafíos climáticos, como las sequías previstas para 2025. ¿Cómo impactará esto en el desempeño de Caja Piura?
Más que las sequías, el desafío es el cambio climático. El año pasado, la ausencia de frío afectó la floración de cultivos en el norte y el centro del país. Este año, el enfriamiento del mar complica la pesca, especialmente la pota, un producto clave para nuestras exportaciones. Estas cadenas productivas incluyen a microempresarios que son nuestros clientes, por lo que hemos implementado medidas como reprogramaciones y refinanciamientos para apoyarlos.
Mencionó la creación de un seguro frente al cambio climático. ¿En qué consiste este producto?
Estamos desarrollando un seguro especializado en eventos climáticos para proteger las operaciones de nuestros clientes, especialmente aquellas relacionadas con el capital de trabajo. El cambio climático no se detendrá, y sus efectos serán cada vez más frecuentes e intensos. Creemos que la banca peruana tiene una gran oportunidad de liderar con productos financieros que acompañen a las empresas, aseguren sus operaciones y mitiguen riesgos asociados a estos fenómenos.
“En Caja Piura no sacrificamos provisiones por utilidades”
Según la SBS, sus utilidades siguen en azul, pero han disminuido en comparación al mismo mes del año anterior. ¿Cómo explican esta situación?
Esto se debe principalmente a las mayores provisiones que hemos realizado. En Caja Piura no sacrificamos provisiones por utilidades. En tiempos como estos, los peruanos han comprendido que una institución financiera segura es aquella que está preparada para enfrentar riesgos.
Si se elaborara un ranking de provisiones para la cartera de alto riesgo en el sistema financiero peruano, estaríamos en el primer lugar. Hemos decidido provisionar más del 100% de nuestra cartera de alto riesgo, lo cual nos posiciona como una caja sostenible y confiable.
¿Cómo afecta esta estrategia de provisiones a los otros indicadores financieros de Caja Piura?
Estamos creciendo en colocaciones y captaciones, reduciendo tanto la cartera de alto riesgo como la mora. Sin embargo, para garantizar que este crecimiento sea sostenible, hemos destinado parte de nuestras utilidades a provisiones. Esto implica tomar dinero de las ganancias para reforzar nuestra capacidad de respuesta ante posibles problemas, como el impago. Es una medida responsable que protege tanto a la institución como a nuestros clientes.
¿Cómo comunican esta estrategia a sus clientes para generar confianza?
Hacemos un esfuerzo por explicar que cada decisión está orientada a garantizar la seguridad de sus ahorros y la estabilidad de la caja en el largo plazo. Creemos que los clientes valoran más una institución sólida que busque sostenibilidad, incluso si eso implica menores utilidades en el corto plazo.