La SBS está a la espera de que se estabilice el proceso de interoperabilidad para pasar al esquema de ‘open payments’, es decir, que se puedan pagar recibos, amortizar préstamos, etc. y, luego, la siguiente etapa sería el ‘open banking’, aunque aún no se tiene fecha, explica a Microfinanzas Jorge Mogrovejo González.
¿Cómo percibe la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) el deterioro que muestran los indicadores financieros de las Cajas Municipales de Ahorro y Crédito (CMAC)?
Cada mes se está hablando de cifras menores de crecimiento de la economía y es lógico que, en esta coyuntura, los intermediarios deben tener más prudencia; van a seguir dando créditos, pero no al ritmo que lo harían en una economía en crecimiento.
Afortunadamente, la mayoría de CMAC está holgada de capital, tienen colchones de provisiones, liquidez, entre otros indicadores positivos. Según algunas voces, el resto del año es incierto, con un crecimiento menor del Producto Bruto Interno (PBI), pero en la medida que las entidades financieras tengan un manejo prudente, deberían soportar ese cierre de año y El Niño.
Cabe recordar que, para afrontar el impacto de El Niño, el Gobierno emitió un decreto de urgencia mediante el cual el Estado puede apoyar la solvencia de las CMAC y a las cajas rurales que enfrenten un problema financiero (deterioro de la cartera) ocasionado por un Niño fuerte, por ejemplo.
¿Cuáles son las perspectivas para las CMAC?
Son positivas, el número de CMAC no ha variado, son 11; la última intervención de la SBS a una CMAC fue en el 2015.
¿Y cómo percibe la situación del sistema microfinanciero en general?
La pandemia afectó bastante al sector de microfinanzas, por eso el programa de apoyo de este Gobierno apunta a las empresas que tienen 50% o más de su portafolio en microcréditos. Eso porque los bancos grandes, al estar más diversificados, pudieron soportar mejor el impacto de la pandemia.
Cuando salíamos de la pandemia hubo un fuerte crecimiento del crédito y, como no era momento para esa expansión, creció la mora y por ello cayó el ritmo de crecimiento de las colocaciones; eso es normal y será hasta que se estabilice la economía y se pueda crecer a un ritmo como el de antes de la pandemia.
¿Y considerando lo sucedido con la Caja Rural de Ahorro y Crédito (CRAC) Raíz y la empresa de crédito Acceso Crediticio?
Prácticamente toda la cartera pesada que generó la pandemia ya está digerida, ha habido reprogramaciones por el tema de las lluvias y los otros impactos que ha sufrido la economía este año.
¿Hay riesgo de intervención a otras microfinancieras?
No, no se ha visto eso después de lo sucedido con la CRAC Raíz, que está intervenida y donde casi todo el dinero de cobertura (de los depósitos por el Fondo de Seguro de Depósito) está a disposición de los clientes, y pronto se va a hacer el pago a los depositantes no cubiertos (cuyos depósitos estaban por encima del límite de cobertura).
Luego de ello, se pasaría a un concurso para liquidar la empresa. Este es un buen ejemplo de una empresa que es intervenida y que no trajo ningún efecto de arrastre al sistema.
¿Y en el caso de Acceso Crediticio?
Ese es un caso distinto; acá se procedió a revocarle la licencia porque tuvo pérdidas por encima de su 50% del patrimonio (como señala la ley). Acceso Crediticio no captaba depósitos del público por lo que el actuar de los accionistas es distinto, no tienen que cautelar los depósitos del público y, tras la pérdida de capital, se convierte en una empresa que opera fuera del sistema regulado, como lo está haciendo, que reporta a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
¿Qué mejoras normativas deben implementar para prevenir que estos casos se repitan?
Bueno, en todo sistema financiero no se puede asegurar que ninguna empresa vaya a quebrar, lo que se debe asegurar es un régimen de resolución que actúe pronto, por ejemplo, antes de que se pierda todo el patrimonio; y, que exista un fondo de seguro que devuelva los depósitos rápidamente para tranquilidad de los clientes.
Tarjetas de crédito
¿Cuál es el balance después de la aprobación por insistencia de la ley que permite a las CMAC emitir tarjetas de crédito sin autorización de la SBS? Hasta ahora ninguna Caja ha hecho uso de esta norma…
Eso demuestra que no era cierto el argumento de que debido al proceso de autorización de la SBS las Cajas no emitían esas tarjetas. Han pasado meses y siendo libres de hacerlo, no lo han hecho.
No me cabe duda de que más de una Caja lo va a hacer, de hecho, Caja Cusco ya lo tiene, pero con autorización de la SBS, siguiendo el proceso anterior.
¿Cuál es el problema entonces?
El tema es que lanzar un producto le demanda a cualquier entidad financiera esfuerzos en tecnología, en inversiones en sistemas para poder tener una tarjeta de crédito, de manera tal que funcione y no acarree riesgos a las mismas empresas financieras y a sus clientes, y eso toma tiempo.
Interoperabilidad
¿Cómo evalúa los avances que se han dado en la segunda fase de la interoperabilidad y qué balance haría desde la perspectiva de la SBS?
El ente rector de este sistema de pagos es el Banco Central de Reserva (BCR). Ha habido algunas ampliaciones de plazos respecto a la programación inicial, dado que se trata de un esfuerzo grande para las entidades financieras, pero vemos que ha marchado bastante bien.
Por ejemplo, la interoperabilidad entre las billeteras digitales está funcionando bien y muestra que ya no es necesario estar en determinada entidad para tener acceso o hacer pagos entre empresas.
¿Qué indicadores muestran ese avance en la interoperabilidad?
La interoperabilidad entre las 2 más grandes billeteras digitales del país muestra un aumento en el número total de pagos. A ello hay que sumar que los demás bancos también pueden hacerlo.
De hecho, el ingreso del Banco de la Nación a este sistema va a ser importante porque tiene una diversidad de clientes que van a entrar al intercambio de información para poder hacer pagos digitales. La idea es que la mayoría de la población esté interconectada en el sistema de pagos digital.
¿Qué viene ahora?
En la SBS vemos que, en este momento, los bancos están abocados al sistema de interoperabilidad, el cual debería dar las bases para el ‘open payments’ (pagos abiertos en línea), que sería la siguiente etapa, y luego podríamos hablar de ‘open banking’.
En este momento el objetivo es terminar con el tema de la interoperabilidad y, cuando esté sólido, avanzar a la siguiente etapa, el ‘open banking’.
¿Cuándo entraría la tercera fase del sistema de interoperabilidad? Estaba programada para iniciar en septiembre…
El BCR es el que maneja los plazos. Tengo entendido que en esta etapa ya entraron las empresas emisoras de dinero electrónico y lo que restaba del sistema financiero, con lo cual ya todo estaría interconectado.
¿Cuál es el beneficio de la interoperabilidad en el sistema de pagos para los usuarios?
Con la interoperabilidad ya no son necesarias transferencias interbancarias (que son complejas) y ya es igual tener una u otra billetera digital (Yape o Plin, u otra interconectada) para hacer pagos digitales entre empresas.
Esto va a ser más importante para las entidades pequeñas, que ya no van a depender de tener edificios grandes con muchas oficinas y cajeros electrónicos, porque van a poder estar conectadas con las demás entidades a la hora de hacer pagos.
Debo indicar que en la SBS hemos verificado que todos los bancos, sobre todo los grandes, ya pueden hacer transferencias interbancarias digitales hasta cierto umbral, sin costo.
Ciberseguridad
¿Cuál será la participación de la SBS en la tercera fase del sistema de interoperabilidad?
La SBS regula todo lo que se refiere al tema de riesgos de ciberseguridad, riesgos operacionales, pero es el BCR el que dirige el proceso en coordinación con la SBS.
¿Qué avances hay en la regulación de ciberseguridad?
La norma existente es para todos y establece que las entidades deben contar con los sistemas, el monitoreo y la gestión apropiados para poder controlar los riesgos relacionados a la ciberseguridad.
A algunas entidades les toma más tiempo estar a la altura que se requiere; otras tienen operaciones más simples y no les es tan complejo hacerlo.
Por ejemplo, entidades que quieren emitir tarjetas de crédito, hacer transferencias interbancarias o si emiten dinero electrónico, deben tener un estándar más alto en ciberseguridad.
Siempre habrá ataques a la ciberseguridad, como se ve en todas partes, pero lo que se busca es que las entidades financieras vayan aprendiendo de los errores y cerrando posibles brechas en su gestión.
Esta es una responsabilidad compartida entre la gestión de las entidades financieras y los clientes que, por ejemplo, no deben caer en ‘fishing’, cuidar más su clave, entre otros.
¿Cuándo se lanzaría la nueva regulación sobre este tema?
Se avanza por etapas, por sectores, el próximo año podríamos tener algunas definiciones importantes referidas a la ciberseguridad.
Open banking
¿Qué avances hay respecto al ‘open banking’?
Estamos a la espera de que se estabilice el tema de la interoperabilidad que debería traer luego un esquema de ‘open payments’, ya que ahora sólo se hacen pagos de un cliente a otro, pero la idea es que se puedan pagar recibos, amortizar préstamos, pagar la membresía de un club, etc.
Es importante ir cerrando etapas para poder avanzar hacia el ‘open banking’. Por ahora, hemos avanzado en lo que son asesorías del Banco Mundial, estudios, preferimos ir paso a paso.
Por ejemplo, un tema es el de la taxonomía de las API (interfaz de programación de aplicaciones que les permite comunicarse entre sí y compartir información y funcionalidades) que, si bien corresponde a las empresas, el regulador puede en ocasiones definir cuáles serían esas taxonomías para ver cómo se conectan.
Esta etapa posiblemente se esté haciendo próximamente.
¿Se tendrán las condiciones para salir en el 2024 con el ‘open banking’ como, por ejemplo, pide Caja Arequipa?
No podría adelantar una fecha. Va a ser importante dar los primeros pasos y ver que las empresas cumplan con todos los requisitos, toda la infraestructura técnica para poder hacerlo.
¿Hay empresas supervisadas que están pidiendo su postergación?
No hemos escuchado eso. Como aún no hemos lanzado un programa a firme, es posible que sea por eso. Pero el verdadero ‘open banking’ es cuando una caja “Y” le puede decir al banco “X”, quiero que le des mi información a la caja “Z”.
Para ello se requieren las API (que son necesarias para el cruce de información) que serán reguladas por la SBS. Estamos en la etapa de estudio de las normas respectivas.
Fintech
¿Qué opina de las recomendaciones finales que ha dado el Indecopi sobre el sector de las fintech?
En realidad, la pregunta es en qué medida podemos tener una fintech regulada y supervisada en tanto tome una licencia que podría ser para una empresa de crédito (digital), por ejemplo.
Actualmente, las fintech son libres para poder operar con entidades financieras ya establecidas, inclusive para dar créditos.
Lo que está prohibido hacer fuera del sistema financiero regulado es captar depósitos, pero no está prohibido prestar; de hecho, hay empresas que pueden dar créditos y algunas de ellas son fintech y solo requieren registrarse en la UIF como sujeto obligado. Pero si quisieran entrar al mercado financiero regulado tendrían que solicitar una licencia de empresa de crédito, por ejemplo, y si quieren captar depósitos una licencia para ser un banco o una Caja.
¿Cómo ha avanzado la supervisión de las fintech?
Estas empresas trabajan asociadas con entidades del sistema financiero. De hecho, en muchos casos, hay bancos que compran fintech y algunas actúan como proveedoras de varias entidades financieras; va a depender de lo que la fintech realmente quiera hacer.
Una fintech podría, por ejemplo, acercarse y pedir una licencia para banco, en ese caso se le va a exigir todos los requisitos que están establecidos para abrir un banco.
¿Ha habido casos de fintech que solicitan licencia como banco?
No, nadie se ha presentado. Sí han tocado la puerta de la SBS empresas que quieren emitir dinero electrónico, algunas están en trámite y siguen su curso; de momento no se ha autorizado a ninguna.
¿Cómo funcionaría una empresa que emite dinero electrónico?
Una empresa emisora de dinero electrónico no capta fondos del público como depósitos, lo que hace es recibir dinero de un cliente que tiene que ser puesto en un fideicomiso y el cliente puede usar digitalmente ese dinero para hacer pagos, transferencias hasta el monto total del dinero que entregó; pero no paga intereses porque no es un depósito, es una billetera electrónica para que el cliente haga transacciones.