El estudio denominado “Preparación para afrontar la cuarta ola de contagios” fue realizado por Marsh Perú a 72 empresas de diferentes sectores económicos.
La cuarta ola de contagios por la COVID-19 se inició en junio de este año en el Perú. Según datos recogidos por el Ministerio de Salud (Minsa), al 17 de septiembre se registraron más de 216 mil decesos y se espera que estos se incrementen en las próximas semanas, así como también los casos positivos que a la fecha ascienden a más de 4,1 millones.
Frente a este contexto, es importante que la población y, principalmente, las organizaciones mantengan y refuercen sus medidas de prevención, así como también continúen promoviendo la vacunación con el propósito de combatir la mortalidad y la propagación de este virus en los ambientes de trabajo.
Por ello, Marsh una de las principales compañías globales en asesoría de riesgos realizó un sondeo sobre esta materia para dar a conocer las medidas que están tomando las compañías y cómo vienen alineándose a los cambios regulatorios.
El estudio denominado “Preparación para afrontar la cuarta ola de contagios”, elaborado por Marsh en julio último, fue realizado a 72 empresas de diferentes sectores económicos sobre todo de alto riesgo de exposición, tales como bancos (18%), empresas del sector construcción (15%), compañías de servicios de transporte y turismo (11%), industria y manufactura (11%), entre otras actividades.
Y entre las principales conclusiones se destaca que, en la actualidad, el 61% de las organizaciones se encuentran operando bajo la modalidad de trabajo híbrido. Esto debido a los innumerables beneficios que brinda dicha modalidad para la prevención sobre el contagio y la continuidad de las actividades laborales, adaptadas a esta nueva realidad.
“Para los empleadores, esta flexibilidad en la ejecución de sus actividades les da el poder de enfrentar de una manera más rápida y oportuna los riesgos relacionados con la COVID-19, fatiga mental, estrés laboral, desmotivación, entre otros que podrían ocasionar un obstáculo para la continuidad de las operaciones”, cita la encuesta.
Así, del 68% de las compañías que han implementado el modelo híbrido y remoto, en el que los colaboradores tienen la opción de repartir su jornada laboral de la semana, trabajando en una oficina central y desde casa, el 41% (28% de los entrevistados) sostiene que mantendrá esta modalidad en forma permanente con poca o ninguna variación. Mientras que el 59% restante lo mantendrá por un periodo limitado.
Promoción de la vacunación
Para las compañías, la promoción de la importancia de la vacuna contra la COVID-19 es de suma importancia.
Por ello, el 65% de las empresas encuestadas promueve esta actividad dentro de la organización, tratando de que la mayoría logre aplicarse la cuarta dosis según el esquema actual de vacunación.
Se debe precisar que, frente a la obligatoriedad de aplicación de la vacuna, de acuerdo con la normatividad vigente, aquellas empresas que no cuenten con la aplicación de las tres dosis de vacunación deberán prestar servicios mediante la modalidad de trabajo remoto.
Según los resultados del presente estudio, por esta razón, el 53% de las empresas ha optado por el trabajo remoto o brindar licencia sin goce de haber a aquellos trabajadores que no han completado las tres dosis obligatorias.
Mientras que solo un 6% ha optado por permitir el ingreso libre, siendo importante reforzar y promover, en este grupo, los beneficios de la inmunización tales como el cuidado y protección hacia sus familiares, así como prevenir posibles complicaciones a largo plazo.
Asimismo, es importante mencionar que el 60% de las organizaciones considera necesario el aislamiento por 7 días en caso se detecte a algún colaborador portador de COVID-19 o con síntomas asociados a la infección.
Igualmente, se puede precisar que las compañías han reforzado sus estrategias de prevención. Por ejemplo, el 38% de las empresas que participaron en el estudio incrementaron la dotación de equipos de protección personal para sus trabajadores.
En contraste, el estudio encontró que las empresas aún siguen invirtiendo recursos en medidas inefectivas como la limpieza y desinfección de superficies que mantiene un 72% de empleadores como medida preventiva.
Sin embargo, el 42% de ellas cree que la cuarta ola ha venido afectando ligeramente a sus actividades.
Servicios de salud ocupacional
Por otro lado, la encuesta también destacó que los servicios de salud ocupacional en la actualidad han tomado vital importancia dentro de las compañías.
Dichos departamentos se encargan de asesorar a los empleadores respecto del mejoramiento de las condiciones de trabajo y el seguimiento de la salud de los trabajadores, tanto de aquellos afectados por la COVID-19 como de los principales riesgos que existen en el lugar de trabajo.
Así, frente a ello, el 74% de las empresas participantes indica que mantiene de forma permanente el servicio de salud ocupacional, mientras que solo un 4% afirma que no lo mantiene o lo ha desactivado.
Además, el 97% de los servicios médico-ocupacionales en las empresas realizan el seguimiento a los casos sospechosos y confirmados y en un 49% el servicio de salud es propio.
Otro aspecto resaltante de la encuesta es el alineamiento de las compañías a las normas sanitarias vinculadas a la pandemia.
Según el estudio, las empresas han tenido que alinearse rápidamente a las nuevas disposiciones para el manejo de los casos sospechosos y confirmados. Así, en su gran mayoría (60%) se han alineado a las normas vigentes.
“Es importante, además de cumplir con la normativa que los servicios de salud ocupacional valoren, individualmente, cada caso para definir la reincorporación y optar por las medidas más protectoras como el trabajo remoto si las características del puesto lo permiten”, concluye el estudio de Marsh.