Los desechos del gas metano que provienen de industrias como la petrolera, gasífera, ganadera y vertederos, puede emplearse para la minería de estas monedas digitales, afirma especialista.
De acuerdo con la investigación realizada por el inversionista en tecnología climática y activista ambiental, Daniel Batten, la minería de bitcoin podría disminuir los gases de efecto invernadero, contribuyendo con la reducción de la temperatura del planeta.
«La minería de bitcoin ha sido sujeta a múltiples debates desde la perspectiva ambiental. En Buda.com hemos abordado en diversas instancias la importancia de alcanzar una minería Bitcoin que sea 100% sustentable. Además, hemos mostrado cómo este nuevo sistema puede contribuir a la construcción de nuevas plantas de energía renovable, para que no sólo la minería Bitcoin sea sustentable, sino que todas las acciones que requieren energía en la tierra”, indicó Carlos Eduardo Bernos, Country Manager de Buda.com en Perú.
En dicho artículo, donde Batten indica que la minería de bitcoin «es mejor para el ambiente de lo que incluso los propios mineros creen», indicó que esta actividad podría reducir de aquí al 2040 en 0.15°C la temperatura del planeta.
Efectos irreversibles
El activista señaló que Bitcoin es una tecnología disponible, práctica y escalable si de gases de efecto invernadero se trata, específicamente, el metano. Esto, según explica, es porque cuando el metano escapa al aire sin quemarse, se calienta hasta 30 veces más que el dióxido de carbono en el lapso de 100 años.
Aunque este gas solo permanece, como máximo, 12 años en la atmósfera, el impacto ambiental que generara es grave, pues podría producir bucles de retroalimentación climática irreversible.
Pero, ¿cómo exactamente ayudaría la minería de bitcoin?
Batten afirma que los desechos del gas metano que provienen de industrias como la petrolera, gasífera, ganadera y vertederos, puede emplearse para la minería de estas monedas digitales. Esto es posible, indica, a través de un sistema que permite eliminar de manera segura estas emisiones al quemarlas.
Así, este calor podría ser procesado por un generador, que convierte la energía térmica en energía eléctrica, la cual podría alimentar una granja de minería móvil. Estas, precisó, no necesitan gasoductos «y pueden estar en funcionamiento en pocas semanas».