Caja Ica ha invertido en la formación de talento humano, tanto dentro de la organización como en la comunidad en general, comenta el padre Edmundo Hernández Aparcana.
(*) Artículo publicado en la edición 221 de la revista Microfinanzas https://statuscomunicaciones.pe/microfinanzas/M221.pdf.
¿Cómo fue el proceso de pasar del clero a la Presidencia del Directorio de Caja Ica?
En 1993, se me propuso integrarme al Directorio de Caja Ica, lo cual inicialmente me generó cierta reticencia dada mi falta de experiencia en el ámbito económico.
Sin embargo, al reconocer la afinidad entre el propósito por el que fueron creadas las Cajas Municipales y el servicio pastoral, vi una oportunidad para seguir ayudando a quienes más lo necesitaban, pero de una manera diferente.
¿Qué motivaciones lo llevaron a ingresar a Caja Ica?
Me di cuenta de que tanto las Cajas Municipales como el clero comparten un propósito común: ayudar a quienes más lo necesitan, eso fue algo que resonó profundamente con mi vocación de servicio.
Desde Caja Ica, contribuimos a mejorar la calidad de vida de las personas que eran excluidas por la banca tradicional, dándoles la oportunidad de hacer realidad sus sueños y los de su familia.
¿Cómo logra gestionar estas 2 facetas de su vida con éxito?
Requiere de mucha responsabilidad, organización y dedicación. Además de presidir Caja Ica, también desempeño funciones pastorales en las iglesias Virgen María de las Nieves y San José de los Molinos. Y desde hace 6 o 7 años soy vicario general o segundo obispo. La clave está en encontrar un equilibrio entre ambas responsabilidades y dedicar tiempo y esfuerzo a cada una.
¿Cuáles fueron los principales desafíos que enfrentó al asumir la Presidencia de Caja Ica?
Al asumir la Presidencia en el año 1996, nos encontramos con una institución relativamente pequeña, con solo una agencia y 16 colaboradores, y había que crecer. Sin embargo, el mayor desafío llegó en 1998 con el Fenómeno de El Niño que devastó la región Ica. Ante esta emergencia, expandimos rápidamente nuestras operaciones para llegar a todas las zonas afectadas como Cañete (Lima) y Huamanga (Ayacucho), lo que marcó el inicio de nuestra expansión.
¿Cómo ha contribuido Caja Ica al desarrollo de las microfinanzas en la región?
Caja Ica ha jugado un rol fundamental en el fomento de las microfinanzas en nuestra región. Hemos sido un vehículo para la inclusión financiera de miles de personas, facilitando su acceso a créditos que han permitido el crecimiento de sus negocios y proyectos.Es gratificante ver cómo nuestros clientes han evolucionado, comenzando con créditos modestos de S/200 o S/500 y ahora solicitando montos mucho más significativos, como S/50.000 o S/100 mil.
Este crecimiento no solo impacta en el desarrollo de sus empresas, sino también en la mejora de su calidad de vida y estatus social. Nos llena de alegría ver cómo familias de bajos recursos han prosperado gracias a la confianza depositada en Caja Ica. Hemos forjado con ellos una relación duradera.
¿Qué estrategias implementaron para lograr este crecimiento?
Nuestra principal estrategia ha sido centrarnos en el talento humano. Hemos invertido para potenciar su proceso formativo dentro de nuestra organización como en la comunidad en general. Creemos firmemente en el poder de la confianza, por lo que nos esforzamos por cultivar relaciones sólidas basadas en la transparencia y la integridad.
Dedicamos esfuerzos continuos en mantener una imagen sólida y confiable, desde la Alta Dirección hasta cada uno de nuestros colaboradores. No se trata solo de otorgar créditos, sino de estar comprometidos a brindar un apoyo integral en los momentos más cruciales de la vida y los proyectos de nuestros clientes, cumpliendo fielmente con nuestro propósito de convertir sueños en realidad, mejorando la calidad de vida de las personas.
¿Qué planes tiene Caja Ica?
Estamos enfocados en el desarrollo de un talento humano que comparta nuestros valores, asegurando que contemos con líderes capacitados para impulsar el crecimiento de Caja Ica, frente a los diversos contextos. Además, buscamos expandir nuestra presencia a regiones donde se necesite apoyo financiero y desarrollo comunitario, para ello la integración de tecnología es una prioridad clave para una mayor eficiencia operativa.