Luis Carranza, exministro de Economía y Finanzas y actual director de Alpha Asesoría Estratégica, durante su intervención en la sesión titulada “Visión de Futuro”, presentó propuestas concretas para encaminar al país hacia la prosperidad.
Carranza comenzó su presentación destacando diversos indicadores que muestran un panorama desafiante en cuanto a la percepción de los ciudadanos sobre el futuro del país. Uno de los temas más alarmantes es el aumento en el número de jóvenes que desean emigrar. “El año pasado, 685 mil jóvenes dejaron el Perú, y 6 de cada 10 jóvenes quieren irse porque no ven un futuro aquí”, comentó.
Este fenómeno lo comparó con una situación similar ocurrida hace tres décadas. A continuación, hizo un repaso de los logros, estancamientos y retrocesos que el país ha experimentado en este tiempo. Destacó avances en la fortaleza macroeconómica, la apertura comercial y el crecimiento de las agroexportaciones. Sin embargo, señaló el estancamiento de sectores como el turismo, la biodiversidad, la minería y la pesca, además de la persistencia de la pobreza, la falta de consolidación de la clase media y la escasa mejora en la calidad de vida de los peruanos. Entre los retrocesos mencionó la debilitada institucionalidad, la ineficiencia del Estado, la falta de seguridad jurídica y la pérdida de respeto hacia la inversión y los empresarios.
En su intervención, recalcó la importancia de comprender el proceso de desarrollo como algo integral. “Aunque observemos las variables económicas, el desarrollo está estrechamente ligado al sistema político y social. Estos deben avanzar de manera sincronizada. Si tenemos un sistema económico que crece, pero no se amplían las clases medias ni se reduce la pobreza, caeremos en trampas de conflictividad que afectarán nuestras instituciones políticas. Y si crecemos sin mejorar nuestras instituciones, ralentizamos el crecimiento”, señaló.
Por último, enfatizó la necesidad de construir una visión a futuro colectiva, centrada en el desarrollo y la cohesión social, que se base en tres pilares fundamentales. El primero es el aprovechamiento de nuestra potencialidad: recursos naturales, ubicación geográfica y competitividad. El segundo pilar son los valores, como la cultura emprendedora y la capacidad de trabajo del peruano. Y el tercer pilar es el contexto global, las megatendencias y la demanda mundial. “La intersección de estos tres pilares definirá la visión que debemos construir juntos”, concluyó.