Desde la reforestación hasta la enseñanza de finanzas personales, Caja Huancayo está liderando el cambio al promover un mayor cuidado del medio ambiente y una educación financiera sólida.
En un esfuerzo constante por retribuir a la comunidad y fomentar un desarrollo económico sostenible, Caja Huancayo ha consolidado su compromiso con la responsabilidad social a través de una serie de iniciativas que han dejado una huella positiva en la región.
Eva María Vivanco Quino, gerente central de Operaciones y Finanzas de Caja Huancayo, proporcionó una visión integral de los esfuerzos que la institución ha desplegado para fortalecer su vínculo con la comunidad local.
Educación financiera
En los últimos años, Caja Huancayo ha venido liderando la labor de reforestación en colaboración directa con la comunidad de Pacha en Huancayo. El programa de plantación de árboles de quinua ha involucrado a todos los colaboradores y directivos de la institución, estableciendo una sinergia que trasciende la mera responsabilidad corporativa.
Vivanco enfatizó que “sembramos ahora para cosechar más adelante, lo que también genera rentabilidad”. Este enfoque de largo plazo no solo contribuye a la salud ambiental de la región, sino que también promueve la sostenibilidad económica.
La entidad financiera ha abrazado la inclusión financiera como un pilar fundamental de su estrategia de responsabilidad social. A través de programas implementados en colegios, escuelas y comunidades a lo largo y ancho del país, Caja Huancayo se ha convertido en un verdadero agente de cambio en la vida de miles de peruanos.
“Enseñamos al público cómo hacer un presupuesto y administrar el ahorro. No difundimos nuestros productos, sino que enseñamos cómo gestionar el aspecto económico”, destacó. Este enfoque educativo no solo empodera a las personas para tomar decisiones financieras informadas, sino que también establece las bases para una relación más saludable con el dinero.
Responsabilidad social
La pregunta clave radica en cómo Caja Huancayo logra equilibrar sus objetivos de rentabilidad con su firme compromiso con la responsabilidad social. Para Vivanco, la respuesta está en la sinergia entre estos dos aspectos.
“Nuestra misión es satisfacer las necesidades de nuestros clientes con innovación. Inculcamos el ahorro como forma de contribuir a la comunidad”, explicó.
Los esfuerzos en educación financiera y las iniciativas de reforestación generan una base sólida que, a largo plazo, impulsa tanto la rentabilidad como la percepción positiva de la comunidad hacia la institución.
La medición del impacto de estas acciones es un elemento fundamental en la estrategia de Caja Huancayo. “Hemos realizado evaluaciones exhaustivas para medir el alcance de nuestras acciones”, aseguró.
Señaló que los resultados son tangibles: en el colegio Pocharcas, por ejemplo, el promedio de atención y comprensión de los estudiantes sobre educación financiera alcanzó un destacado 85%.
“Estos logros no solo refuerzan la confianza de la comunidad en la institución financiera, sino que también motivan a Caja Huancayo a seguir ampliando y adaptando sus programas de responsabilidad social para abordar las necesidades cambiantes de la sociedad”, afirmó Vivanco.
Agente de cambio
Caja Huancayo se compromete a seguir siendo un agente de cambio positivo en la comunidad, adaptándose a las cambiantes necesidades y desafíos.
A través de su enfoque en la educación financiera y otras iniciativas de responsabilidad social, la institución está forjando un camino hacia un futuro más sostenible y próspero para la región y sus habitantes.
La historia de Caja Huancayo es un testimonio vivo de cómo una institución financiera puede desarrollar responsabilidad social en el tejido de su identidad, equilibrando hábilmente sus objetivos financieros con su compromiso con la comunidad y el medio ambiente.
A medida que continúa este viaje, Caja Huancayo demuestra que el impacto económico y social puede ir de la mano, creando un futuro más brillante para todos.