Standard and Poor’s afirmó que Perú puede mejorar su calificación crediticia si en los próximos años se establecieran políticas predecibles y eficaces, y el manejo económico sostenga un cambio en la confianza de los inversionistas.
La agencia calificadora de riesgo crediticio Standard and Poor’s (S&P) ratificó la calificación crediticia de Perú para su deuda en moneda extranjera en BBB y en moneda nacional en BBB+ con perspectiva estable, anunció el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
Señaló que ello está respaldado en los bajos niveles de deuda pública de Perú y su sólida posición externa neta, lo que reafirma la solidez de la economía peruana a pesar de la elevada volatilidad del contexto local e internacional.
En opinión de S&P, es probable un déficit fiscal decreciente durante los años 2022-2025, con un déficit promedio de 1,9%. También espera que la deuda pública bruta se mantenga levemente por encima del 30% del Producto Bruto Interno (PBI), y que la deuda neta alcance alrededor del 24% del PBI para el 2025.
La ratio de deuda/PBI de Perú está muy por debajo de la mediana de los países con calificación ‘BBB’ de 55,1%, para el 2022. S&P espera que los indicadores externos de Perú se mantengan sólidos, también la continuidad en la política monetaria, así como una moderación gradual de la inflación.
S&P mencionó que el Gobierno ha señalado la intención de mantener continuidad en la política macroeconómica, esperando que persistan las políticas fiscales y monetarias sólidas, lo que ayudará a mantener la estabilidad económica.
Deuda moderada
Así, S&P indica que la deuda del Perú es moderada y que tiene una posición de acreedor externo neta; asimismo, espera que los precios de los metales sigan siendo un factor externo favorable para Perú, contribuyendo al crecimiento en el mediano plazo.
Los precios del cobre se mantienen por encima de su promedio a largo plazo a pesar de la reciente caída debido a la desaceleración de la economía mundial.
Sobre la calificación crediticia del Perú, el MEF afirmó que se mantiene como la segunda mejor en América Latina, ubicándose dos peldaños por encima del grado de inversión, lo que permite el acceso a los mercados internacionales en condiciones favorables, tanto para el sector público como privado.
El MEF también subrayó que el Perú es uno de los primeros países emergentes en determinar reglas fiscales para los siguientes años tras el impacto de la COVID-19. “Esto se basa en la larga historia de gestión responsable de las finanzas públicas del país”, indicó.
Recordó que, de acuerdo con la Ley N° 31541, el déficit fiscal y la deuda pública convergerán gradualmente para cumplir con sus reglas fiscales de mediano plazo (1% del PBI y 30% del PBI, respectivamente).
Otras proyecciones
Además, S&P estima que podría haber un potencial incremento en la producción minera después de la finalización de proyectos de inversión clave en el 2022.
En ese sentido, el MEF dijo que la reciente confirmación de proyectos mineros también impulsará la inversión minera en el mediano plazo con compromisos por alrededor de US$9.000 millones.
En adelante, S&P señala que Perú puede mejorar su calificación crediticia si en los próximos años se establecieran políticas predecibles y eficaces, y el manejo económico sostenga un cambio en la confianza de los inversionistas y mejore materialmente las perspectivas de crecimiento, acompañadas de una composición de la deuda menos vulnerable.
Finalmente, el MEF dijo que el Gobierno “continuará con su compromiso de priorizar la estabilidad macroeconómica y financiera, la disciplina fiscal, así como el fortalecimiento institucional, para promover el crecimiento económico sostenido, cerrar las brechas estructurales del país, impulsar la competitividad y productividad, y mejorar el bienestar de la población”.