El ministro de Relaciones Exteriores Lin Chia-lung (derecha) habla sobre las relaciones entre Taiwán y Japón durante una entrevista con Yoshiaki Nishimi, de la oficina de Taipéi del Sankei Shimbun.
El ministro de Relaciones Exteriores, Lin Chia-lung, hizo un llamado para ampliar la cooperación entre Taiwán, Japón y Filipinas en respuesta a los desafíos regionales.
El ministro hizo estas declaraciones durante una entrevista con Yoshiaki Nishimi, director de la oficina del Sankei Shimbun en Taipéi, para dos artículos publicados el 14 de octubre en las ediciones impresa y digital del medio japonés.
Al describir a Sanae Takaichi, recientemente elegida presidenta del Partido Liberal Democrático, como una líder visionaria con gran determinación, Lin expresó que Taiwán espera que Japón asuma un papel más relevante en la región del Indo-Pacífico.
Según el ministro, Taiwán espera colaborar con Japón y Filipinas para enfrentar las amenazas de China, incluidas tácticas de zona gris, campañas de desinformación y sabotaje de cables submarinos. Lin añadió que las naciones democráticas de la primera cadena de islas deben construir un marco de seguridad y trabajar con EE. UU. y otros socios de ideas afines para proteger la paz y la estabilidad regional.
Lin instó a ambas partes a elevar las relaciones bilaterales a un nuevo nivel de asociación, incluyendo acelerar las negociaciones para un acuerdo de asociación económica. El ministro también instó a Japón que apoye los esfuerzos de Taiwán para unirse Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (CPTPP, siglas en inglés).
El ministro afirmó que el apoyo a Taiwán por parte del Congreso de EE. UU. y de la sociedad en general trasciende las líneas partidarias, señalando que Taiwán es clave para la seguridad estadounidense y la estabilidad de las cadenas de suministro globales. Lin añadió que las visitas a países sin relaciones diplomáticas formales tienen como objetivo fortalecer los vínculos entre democracias y contrarrestar los esfuerzos de China por bloquear la participación internacional de Taiwán.
Citando el desarrollo democrático de Taiwán y el principio de autodeterminación de la Organización de las Naciones Unidas, Lin afirmó que la soberanía de la nación pertenece a sus 23 millones de habitantes. El ministro agregó que EE. UU. considera que China distorsiona intencionalmente documentos de la era de la Segunda Guerra Mundial y que las reclamaciones de Pekín son fabricaciones, ya que ninguno de esos registros determina el estatus político de Taiwán.