VOLATILIDAD FINANCIERA: CONSECUENCIA DE LA GUERRA COMERCIAL

Escrito por César Martinez. Publicado en Mayo 2019

Documento FELABAN No 27 
23 de mayo 2019

Mayo de 2019 ha mostrado el retorno de la volatilidad financiera, y los mercados bursátiles de los Estados Unidos (el más grande del mundo) evidenciaron el fenómeno. Pasada la primera mitad de mayo las desvalorizaciones son evidentes y este resulta ser el tema de los analistas, operadores de mercados e inversionistas: Dow Jones (-3.1%), Nasdaq (-3.4%), S&P 500 (-2.9%).

Mientras que a fines del mes de abril el índice VIX era cercano al 13%, a mediados de mayo el mismo llegó al 20%. Holger Zschäpitz, editor económico del diario alemán Die Welt, estima que durante los 20 primeros días del mes de mayo de 2019 los mercados globales han perdido USD 540.000 millones en términos de capitalización bursátil. De acuerdo con el índice MSCI de los mercados emergentes de monedas, en 2019 se presentan 4 meses consecutivos de variaciones negativas. El IIF (Institute for International Finance) por su parte informó que a comienzos de abril que el flujo de capitales a los mercados emergentes viene en descenso: USD 52.000 millones en enero, USD 31.000 millones en febrero y USD 25.000 millones en marzo. Muchos temen que se esté presentando un Déjà vu del episodio de turbulencia financiera de hace un año exactamente.

La diferencia es que en el 2018 su origen provino de las posturas normalizadoras de política monetaria de la Reserva Federal, mientras que en el 2019 la situación tiene su origen en las bajas expectativas de crecimiento económico y los efectos de la guerra comercial entre China y los Estados Unidos. En este se ha pasado de las amenazas a los hechos: aranceles, retaliaciones, restricciones a las compañías de tecnología (caso Huawei) y hasta la sospecha de que la serie de televisión estadounidense Game of Thrones no pudo verse en China por motivos de las disputas comerciales .

América Latina no ha estado lejana a los efectos de la turbulencia que impactan los precios de los activos financieros. Con base en las cifras del World Federation of Exchanges, puede observarse que la capitalización bursátil de las 8 bolsas de valores más grandes de América Latina se ha reducido un -9.7% entre abril de 2019 y el año inmediatamente anterior.

Otra consecuencia de la guerra comercial en los mercados financieros está relacionada con el debilitamiento de las monedas emergentes. Este fenómeno por un lado aumenta la competitividad cambiaria y sirve de variable de ajuste de corto plazo para contener las presiones del sector externo macro-financiero. Sin embargo, el costo es el nocivo efecto que se da con la reducción de rentabilidad relativa de la inversión externa, el menor monto marginal de entrada de la misma, y la inercia para generar más debilitamiento de las monedas.

Un reciente trabajo del BIS (Bank for International Settlements) confirma dicha premisa mencionando además que la alternativa para mitigar este fenómeno son las intervenciones esterilizadas en el tipo de cambio en los mercados emergentes. Si bien, con esta acción de política monetaria se respetan los preceptos del mercado, en este caso de devaluación, ésta puede ser considerada temporal y menos acentuada. Para los investigadores del BIS, con este arreglo cambiario los bancos centrales pueden permitir la devaluación a la vez que acumulan reservas internacionales que sirvan de munición futura para otorgarle liquidez a la economía.

Las turbulencias financieras hoy por hoy están lejos de desaparecer. Muchos, como la revista The Economist, mencionan recientemente que la “volatilidad es tu amiga”, siempre y cuando el análisis de riesgo esté presente y la cultura de administración de productos tales como los derivados financieros se desarrolle.

La incertidumbre vuelve a jugar. En los mercados avanzados en razón a que por ahora no se ve una solución rápida a los problemas comerciales, además de una menor perspectiva de crecimiento. En los mercados emergentes existen decisiones claves que se avecinan. Los planes de gobierno de nuevas administraciones en Suráfrica y Tailandia, la expectativa por el desempeño económico de China y los desarrollos de una eventual reforma de pensiones en Brasil. Las decisiones de política monetaria en países como Chile, Perú, Colombia y la aprobación del Plan de Desarrollo de México. Adicionalmente, están temas tales como la situación política de Turquía y la evaluación del primer año del acuerdo de Argentina y el FMI. Estos hechos marcaran la pauta para los inversionistas y observadores especializados.

Según el premio Nobel de economía Robert Schiller, es difícil que los agentes económicos prevean crisis financieras. Pese a la buena matemática, la lectura de los mercados y las previsiones hechas con buen juicio, la espontaneidad juega un rol crucial a la hora de tomar decisiones. Sí esta no se acompaña de política macroeconómica responsable, es probable que para los siguientes meses tengamos nuevas sorpresas. Desagradables sorpresas.