LA SALIDA FRENTE A LA CRISIS ES SEGUIR BANCARIZANDO

Escrito por Microfinanzas. Publicado en Noviembre 2020

Para el experimentado Pedro Talledo, flamante gerente de la cooperativa Santa Isabel, es necesario que las entidades financieras apoyen a los emprendedores, principalmente no bancarizados, en el actual contexto.
Las Cajas de ahorros o cooperativas tienen una función económica y social. La primera se refiere a intermediar flujos, gestionando adecuadamente riesgos financieros; mientras que la segunda, implica el esfuerzo por apoyar financieramente a aquellas personas marginados por la banca, consideró Pedro Talledo, gerente de la cooperativa Santa Isabel.
La experiencia de Talledo al haber trabajado, aproximadamente 15 años, en una caja en Alemania pudo haberlo hecho un creyente en la tradición alemana de que las cajas municipales debían ser un servicio público. Con mas de 30 años de experiencia, Talledo se considera el fundador de todas las cajas de ahorros en el país.
Ahora al frente de la cooperativa Santa Isabel y en base a su experiencia, Talledo sabe la estrategia a seguir para incrementar el patrimonio y mejorar los indicadores financieros de la cooperativa.
“Hay que buscar clientes que no sean muy grandes y que no han sido atendidos por las entidades financieras. Debemos incorporarlos al sistema financiero. Lo importante es facilitar el capital, acompañar, capacitar y educar financieramente a la persona que se está bancarizando. Hacerlo un sujeto de crédito sostenible. Todo esto a la par de resguardar los márgenes de ganancia de las entidades financieras”, comentó Talledo.
Actualmente la cooperativa Santa Isabel cuenta con aproximadamente 26.000 socios. Su cartera de créditos suma más o menos de S/18 millones, mientras que sus ratios de morosidad están en 5%. “Estamos por buen camino. Recién estoy empezando, pero la meta para el próximo quinquenio es convertir a Santa Isabel en una institución financiera con un nivel bancario fuerte, aumentar el número de socios y que crezcan los aportes”, subrayó el experimentado gerente. Durante su trayectoria laboral, Talledo asegura ser creador de 12 cajas de ahorro.
La cooperativa Santa Isabel suma en aportes S/ 10 millones anuales y con tendencia a incrementarse explicado por el ingreso de nuevos socios. Este importante “colchón” le ha permitido seguir colocando créditos durante la pandemia e incluso competir con importantes entidades financieras como Mi Banco.
“La pandemia no nos ha afectado mucho. No olvidemos que al iniciar la pandemia la SBS sacó una resolución para reprogramar todos los créditos normales por 6 o 12 meses. Ahí salió Mi Banco a decir que no cobrará intereses durante la pandemia, entonces para que nuestros clientes no se vayan tampoco hemos cobrado interés. Hemos competido de igual a igual con una institución como Mi Banco que tiene una importante espalda financiera”, relató.
Talledo la tiene clara. Para él, la salida ante la crisis es seguir bancarizando considerando que de esa manera se benefician las entidades financieras y los emprendedores no bancarizados que están en busca de capital para retomar o reflotar sus negocios.
“Vamos a seguir colocando créditos. Durante la pandemia hemos colocado créditos, pero no como quisiéramos. La economía se viene reactivando de a pocos y es ahora que los emprendedores que se quedaron sin capital por la pandemia necesitan capital fresco para retomar sus actividades. Entonces, veamos a la crisis como una oportunidad para bancarizar y acercarnos a esos millones de personas que necesitan liquidez. Es momento de recuperar lo perdido por la pandemia”, resaltó Talledo.
El potencial sujeto de crédito de la cooperativa Santa Isabel están en el campo, en los mercados y la ciudad. Según Talledo, la estrategia de la entidad es acercar el producto o servicio financiero al lugar donde trabaja el cliente.
“Las cajas han impulsado la descentralización del país, porque llevaron la inclusión financiera a todos los rincones del país con la entrega de microcréditos a los emprendedores peruanos marginados por la banca tradicional. Es casi una labor social”, concluyó Talledo.