Falta de financiamiento, burocracia y gestión ineficiente explican por qué el 2.4% de empresas formales desaparece anualmente. En 2024, 78 mil MYPE cerraron, el doble que en 2020. La manufactura perdió 4 mil empresas y 12 mil empleos anuales en promedio, advirtió Ana María Choquehuanca Miranda, exministra de Producción.

(*) Artículo publicado en la edición 234 de la revista Microfinanzas https://statuscomunicaciones.pe/microfinanzas/M234.pdf
Según los últimos datos disponibles, ¿cuántas micro y pequeñas empresas existen en el Perú y cuál es la proporción entre las formales e informales?
En 2024, se estima que existen más de 5.4 millones de MYPE, sin incluir a unidades agropecuarias productivas informales. El 57.4% de las MYPE (más de 3.1 millones) operan en la informalidad, mientras que el 42.6% (más de 2.3 millones) lo hacen de manera formal, de acuerdo con información del INEI y SUNAT.
¿Qué porcentaje de estas MYPES son lideradas por mujeres y cómo ha evolucionado esta participación en los últimos años?
En el último quinquenio, la participación de las mujeres en la conducción de MYPE formales en el Perú mostró un aumento, al pasar del 42.7% en 2020 al 44.2% en 2024. Es decir, en promedio, 4 de cada 10 MYPE formales del Perú son conducidas por mujeres (SUNAT).
¿Cómo se distribuyen las MYPES a nivel regional y por sectores económicos como comercio, manufactura y servicios?
En 2024, el 43.8% de las MYPE formales se ubicaron en Lima (1’018,308 empresas), seguida de Arequipa con el 5.9% (136,988), La Libertad 5.3% (123,162), Cusco 4.2% (98,507) y Piura 4.1% (94,298). En conjunto estas regiones concentran el 63.2% del total de MYPE formales a nivel nacional (SUNAT).
Las MYPE se concentraron principalmente en los sectores de comercio y servicios, que juntos representan el 85.8% del total en 2024. El 44.2% (1’028,768 empresas) corresponde al comercio y el 41.6% (966,559 empresas) a servicios. Luego le siguen los sectores de manufactura (8.5%), construcción (3.5%), agropecuario (1.2%), minería (0.8%) y pesca (0.2%) (SUNAT).
¿Cuántas MYPES se crean y cuántas desaparecen anualmente en el país? ¿Qué tendencias se han observado en los últimos 5 o 10 años?
En el último quinquenio, se han creado, en promedio, más de 139 mil MYPE formales por año, lo que representa una tasa de entrada promedio anual del 6.5%. Durante este periodo, la creación de nuevas empresas mostró un crecimiento promedio anual de 6.9%, pasando de 113 mil MYPE registradas en 2020 a 147 mil en 2024 (SUNAT).
En los últimos cinco años, han salido del mercado en promedio 53 mil MYPE formales por año, lo que significa una tasa de salida promedio anual del 2.4%. Durante este periodo, el número de MYPE que cerraron operaciones se duplicó, pasando de 38 mil MYPE fuera del mercado en 2020 a 78 mil en 2024 (SUNAT).
Desde su experiencia, ¿Cuáles son las principales causas que explican la alta mortalidad de las MYPES?
Entre las posibles causas de la mortalidad de las microempresas tenemos la limitada disponibilidad de capital humano calificado, lo cual dificulta una gestión eficiente del negocio; el restringido acceso al financiamiento, ya sea por falta de historial crediticio, garantías o por las altas tasas de interés; y una carga regulatoria compleja que representa un costo adicional significativo, especialmente para negocios en etapas tempranas. A ello se suma la escasa experiencia en el mercado, factores que en conjunto las hacen más vulnerables y aumentan su probabilidad de salir del mercado.
Se estima que 8 de cada 10 MYPES son informales. ¿Por qué no se ha logrado reducir esta cifra en la última década?
La persistencia de altos niveles de informalidad entre las MYPE se debería a factores estructurales como la baja capacidad productiva, barreras burocráticas, la débil difusión de los beneficios de la formalización, escasa cultura tributaria y los altos costos percibidos de formalización frente a sus beneficios. La informalidad surge, principalmente, cuando los costos de circunscribirse al marco legal y normativo de un país son superiores a los beneficios que ello conlleva, según el BCR. Este fenómeno es evidente en las MYPE en etapas iniciales o con prácticas deficientes, pues estos tienden a permanecer informales, al no percibir suficientes beneficios frente al costo de formalizarse..
¿Considera que PRODUCE, SUNARP u otras entidades del Estado están ejecutando estrategias eficaces para promover la formalización empresarial?
Sí, considero que entidades como PRODUCE, SUNARP y SUNAT han venido implementando estrategias cada vez más eficaces para promover la formalización, destacando iniciativas como el RUS, el RUC digital y los Centros de Desarrollo Empresarial. La simplificación de trámites mediante la interoperabilidad entre instituciones refleja el compromiso del Estado por facilitar el acceso a la formalidad, aunque aún persisten desafíos por superar.
Desde su perspectiva, ¿qué medidas urgentes se deberían implementar para avanzar hacia una economía más formal e inclusiva?
Para avanzar hacia una economía más formal e inclusiva, es crucial simplificar los trámites para constituir empresas y establecer un sistema de tributación simplificada. También es necesario mejorar la difusión de los beneficios de la formalización, fortalecer la fiscalización y ampliar el acceso al financiamiento mediante microfinanzas e innovación crediticia. Además, potenciar la participación de las MYPE en las compras públicas permitirá un acceso real al mercado, contribuyendo a un ecosistema empresarial más competitivo y formal.
¿Qué porcentaje de microempresas accede actualmente a financiamiento formal y cómo ha evolucionado este indicador en la última década?
A febrero de 2025, el 27.3% de las MYPE formales accedieron al financiamiento formal, lo que equivale a 630,186 empresas. En la última década, este indicador experimentó una tendencia decreciente entre 2015 y 2019, pero tuvo una fuerte recuperación en 2020, alcanzando el 29.1%, gracias al impulso de programas crediticios en el contexto de la pandemia. Desde entonces, el acceso al financiamiento se ha estabilizado en torno al 27-28% (SBS, SUNAT).
¿Cuáles son los principales obstáculos estructurales que siguen limitando el acceso de las MYPES al crédito?
La alta informalidad en el sector MYPE sigue siendo uno de los principales obstáculos estructurales para acceder al crédito. Aunque muchas MYPE han logrado formalizarse, todavía enfrentan una oferta crediticia limitada, con tasas de interés más altas en comparación con las grandes empresas y requisitos de garantías difíciles de cumplir. Además, los trámites extensos y la burocracia de los intermediarios financieros, sumados a la falta de educación financiera, dificultan aún más su acceso al financiamiento. Superar estas barreras es una prioridad para fomentar el crecimiento y la competitividad de las MYPE.
COFIDE ha anunciado que asumirá hasta el 50% del riesgo en garantías para préstamos a MYPES. ¿Considera esta una solución efectiva? ¿Qué otras alternativas podrían impulsarse para mejorar el acceso al financiamiento?
La iniciativa de COFIDE de asumir hasta el 50 % del riesgo en garantías para préstamos a MYPE es un avance clave para facilitar su acceso al crédito. No obstante, su efectividad requiere de medidas complementarias como educación financiera, fortalecimiento del historial crediticio, simplificación de procesos y el impulso de productos financieros alternativos. La articulación público-privada y la digitalización de trámites también serían determinantes para generar un entorno financiero más inclusivo y sostenible para las MYPE.
El INEI reportó una caída de -1.75% en la manufactura no primaria en febrero de 2025. ¿Qué factores explican este desempeño negativo y cómo impacta a las MYPES del sector?
La caída de -1.75% en la manufactura no primaria en febrero de 2025 se debe principalmente a la reducción en la producción de bienes de consumo (-1.7%), entre ellos productos de tocador, bebidas no alcohólicas, artículos de papel, plásticos, impresión y joyas y artículos conexos, asociado a una disminución en la demanda local.
Esto podría afectar a las MYPE del sector, en especial a aquellas con menores niveles de tecnología, capital y diversificación, que presentan mayor vulnerabilidad frente a las fluctuaciones en la demanda y los cambios en las cadenas de valor.
¿Se tiene una estimación del número de MYPES manufactureras que han cerrado en el último año o quinquenio? ¿Cómo se ha visto afectado el empleo en este rubro?
En el último quinquenio, en promedio, cerca de 4 mil MYPE formales del sector manufactura salieron del mercado por año, lo que equivale a una tasa de salida promedio anual del 2.3%.
Esta dinámica ocasionó la pérdida de alrededor de 12 mil empleos formales por año, atenuando el crecimiento del empleo formal generado por las MYPE manufactureras (1.5% en promedio anual).
Desde enero de 2025, las MYPES están obligadas a presentar estados financieros. ¿Considera que están preparadas para asumir esta exigencia?
Esta medida representa un reto para las MYPE debido a limitaciones en capacidades contables y tecnológicas, así como a los costos asociados. Sin embargo, también es una oportunidad para mejorar su transparencia, acceso a financiamiento e integración productiva, siempre que vaya acompañada de capacitación, asistencia técnica y herramientas digitales accesibles.
¿Qué tipo de acompañamiento o soporte técnico deberían ofrecer las instituciones para facilitar su cumplimiento?
El tipo de acompañamiento que se recomienda a las MYPE para cumplir con esta obligación incluye:
Asesoría contable, para la preparación y presentación correcta de los estados financieros. Capacitación para entender los requisitos y las implicaciones de la nueva norma. Software contable para facilitar la gestión y el registro de la información financiera.
Claves para potenciar las MYPE: Menos burocracia, más innovación y financiamiento adaptado
¿Qué porcentaje de MYPES se ha beneficiado efectivamente con programas estatales de financiamiento, capacitación o digitalización?
Los programas estatales (Impulso MYPERÚ, Reactiva Perú, FAE MYPE, PAE MYPE, FAE AGRO, FAE Turismo, FAE TEXCO) han beneficiado a 1’013,023 MYPE, según información del Ministerio de Economía y Finanzas. Esto representaría más del 40% del total de MYPE formales en 2024.
¿Cómo evalúa la eficacia de estos programas? ¿Cree que están bien focalizados o requieren un rediseño profundo?
Los programas implementados han sido fundamentales para brindar liquidez oportuna a las MYPE y mitigar los efectos de la pandemia del COVID-19, permitiendo la continuidad de muchas unidades productivas y la protección del empleo.
Han estado bien focalizados en segmentos bancarizados, lo que facilitó una rápida ejecución y alto alcance. No obstante, reconocemos la necesidad de seguir avanzando hacia una mayor inclusión financiera.
Más allá del acceso a financiamiento, ¿cuáles son hoy los principales cuellos de botella que enfrentan las MYPES peruanas?
Entre los principales cuellos de botella que enfrentan las MYPE peruanas se destacan la excesiva burocracia y los trámites engorrosos, que dificultan su formalización, el acceso a programas estatales y su participación en compras públicas. A esto se suma la informalidad estructural y la competencia desleal, que generan desventajas para las empresas formales, las cuales deben asumir mayores costos regulatorios. Además, la baja productividad, consecuencia de limitaciones tecnológicas, falta de capacitación y escasa innovación, limita su competitividad e inserción en las cadenas globales de valor.
¿Qué reformas estructurales considera urgentes para construir un ecosistema empresarial más sólido y competitivo para las MYPES?
Para construir un ecosistema empresarial más sólido y competitivo para las MYPE, se debe impulsar reformas estructurales como: (i) promover la formalización como vía para mejorar su sostenibilidad y acceso a beneficios del Estado; (ii) fortalecer el capital humano mediante programas de capacitación técnica que eleven la productividad laboral; (iii) fomentar encadenamientos con empresas tractoras, que impulsen la inclusión productiva y la generación de empleo formal; y (iv) desarrollar infraestructura productiva y parques industriales que potencien la eficiencia colectiva y otorguen ventajas competitivas a las MYPE; (v) mejorar la capacidad en innovación tecnológica.
¿Qué acciones prioritarias debería asumir el próximo gobierno para fortalecer a este segmento clave de la economía nacional?
El próximo gobierno debe priorizar acciones clave para fortalecer las MYPE, como facilitar su formalización mediante la simplificación de trámites, mejorar la infraestructura productiva y comercial, y facilitar el acceso al financiamiento. Además, es crucial fomentar la sostenibilidad productiva, diversificar la oferta de productos, y promover la innovación tecnológica. También se debe optimizar los programas de apoyo, asegurando que sean accesibles y eficaces. Estas acciones contribuirán al crecimiento y la competitividad de las MYPE, impulsando la economía nacional.

