En los procesos de selección de personal, se viene valorando más las habilidades blandas.
El Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) indicó que, en el último trimestre del 2022, el empleo en el Perú solo creció un 0.7 %, lo cual evidencia que el avance de la empleabilidad nacional es lento.
Por ello los procesos de convocatoria y la competencia en el mercado laboral se tornan más exigentes. Antes muchos empleadores priorizaban las competencias técnicas y la experiencia profesional, sin embargo, actualmente, las habilidades blandas son más valoradas.
Rizal Bragagnini, Chair de Vistage, sostuvo “Por experiencia, las habilidades blandas correlacionan más con el éxito a largo plazo – entendido como generación de valor real para la empresa y la organización. Otro punto crítico a considerar es que el colaborador “encaje” con la cultura empresarial para asegurar los resultados deseados”.
Bragagnini recomienda cinco competencias básicas que ayudan a atender las demandas laborales actuales:
Conocimientos técnicos y experiencia laboral mínima: Estos atributos serán atractivos para ser convocados a una entrevista de selección; sin embargo, estos no aseguran el puesto de trabajo ni el éxito en la posición.
Liderazgo: Si un líder logra que su equipo “quiera” hacer lo que se debe hacer, tendrá que supervisar menos que los jefes que solo logran que la gente “haga” lo que debe hacer, lo cual compromete a un mayor control.
Iniciativa y cumplimiento o “follow through”: Hoy en día, las empresas necesitan colaboradores que tomen la iniciativa en la identificación temprana de problemas y asuman el liderazgo en su resolución. Muchas empresas pierden mucho tiempo y dinero cuando la gente que debería identificar (y solucionar) el problema no lo hace porque no quiere, no sabe o porque piensa que no es su trabajo o responsabilidad.
Pensamiento estratégico: Actualmente se espera que los trabajadores lleguen a sus jefes con: un diagnóstico de la situación / problema (análisis), conclusiones (razonamiento) y recomendaciones (estrategia).
Inteligencia emocional: Esta habilidad será la clave para salir adelante en un mundo donde la inteligencia artificial está cada vez más presente. Ayuda a entender y gestionar las emociones propias y las de los demás, lo que facilita el desarrollo de relaciones más saludables y comunicación efectiva. Además, contribuye en el desarrollo de la capacidad de recuperarse de situaciones adversas de manera ágil, en el manejo del estrés y adaptación a los cambios.
Lima representa más de la mitad del total de conexiones (54.9%), mientras que las otras regiones en conjunto representan el 45.1%, superando la participación conjunta del 44.1% registrada en marzo de 2022.
Este informe ha sido elaborado por la Dirección de Políticas Regulatorias y Competencia (DPRC) del OSIPTEL, basado en la información reportada por las empresas operadoras de acuerdo con la Norma de Requerimientos de Información Periódica (NRIP).