MONASTERIO DE SANTA CATALINA

Escrito por César Martinez. Publicado en Enero 2018

El Monasterio de Santa Catalina de Siena o Convento de Santa Catalina está en Arequipa. Fue el virrey Francisco Toledo quien dio la licencia para la fundación del convento con el nombre de “Monasterio de Monjas Privado de la Orden de Santa Catalina de Siena”.

En 1579 la vecina María de Guzmán, viuda de Diego Hernández de Mendoza, mujer hermosa, rica y joven que no tuvo hijos, decide recluirse en el monasterio en construcción cediendo para ello todos sus bienes, quien se convierte por orden del Cabildo en la “Primera pobladora y priora del Monasterio”. Las mujeres que ingresaron como monjas al monasterio fueron criollas, mestizas y hasta hijas de familias nobles. La historia cuenta del ingreso de las denominadas “monjas pobres” que, sin tener hábitos, ni abrazar a vida religiosa, ingresaban a ejercitar sus virtudes y ser emperatrices de muchas otras. Se sabe que, a mediados del siglo XVIII, la ciudadela contaba con más de 300 mujeres de hábito y doncellas de servicio.

El monasterio lleva el nombre de Santa Catalina de Siena, quien fue Catalina Benincasa, nacida en Siena el 25 de marzo de 1347 y fallecida en Roma el 29 de abril de 1380. La Iglesia Católica la reconoce como copatrona de Europa e Italia. En 1970, el Papa Pablo VI le otorgó el título de “Doctora de la iglesia”, siendo la segunda mujer en obtener tal distinción, después de Santa Teresa de Jesús y antes de Danta Teresita del Niño Jesús. Catalina fue una predicadora y escritora, hija número veintitrés de un total de veinticinco hermanos.

El estilo arquitectónico del monasterio es fundamentalmente colonial, pero de naturaleza mestiza. A diferencia de otras construcciones virreinales de esta parte de América Latina, en Arequipa y especialmente en Santa Catalina, se observa la fusión de elementos españoles y nativos.

Durante casi dos siglos, en la época virreinal, los claustros y celdas del monasterio de Santa Catalina, han sufrido modificaciones, agregados y nuevas construcciones, que lo han convertido en un verdadero muestrario de la arquitectura colonial de Arequipa.

En la Pinacoteca podemos observar una de las muestras más importantes del arte religioso del continente. Además de una numerosa colección de obras de la llamada Escuela Cusqueña de pintura, máxima expresión de la fusión de los sentimientos y valores de dos culturas: la incaica y la española.

Una de las principales beatas que está identificada con el monasterio es Ana Monteagudo Ponce de León, conocida como Sor Ana de los Ángeles Monteagudo, quien nació en Arequipa el 26 de julio de 1602. A los tres años, fue entregada a las monjas catalinas que residían en el Monasterio de Santa Catalina. Cuando tenía aproximadamente 14 años de edad, sus padres decidieron que ya había llegado el momento de reintegrarla a la vida de la ciudad y fue retirada del monasterio, con el fin de comprometerla.

En la visita que realizó el Papa Juan Pablo II al Perú en 1985 estuvo en Arequipa, beatificó a Sor Ana de los Ángeles Monteagudo.