Ex jefe de la SBS opina que Cajas deben tomar de buena manera la decisión final que tenga el Congreso. Por su parte, Jorge Carrillo Acosta, especialista en microfinanzas, menciona que la SBS necesita validar que las Cajas cuentan con la gestión de riesgo adecuada para proteger el dinero de los ahorristas.
Conocedores del sistema microfinanciero como el exjefe de la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS), Juan José Marthans, y el docente de Pacífico Business School, Jorge Carrillo Acosta, se manifiestan en contra de que las Cajas Municipales de Ahorro y Crédito (CMAC) tengan autorización directa para emitir tarjetas de crédito, es decir, consideran que deben seguir el procedimiento previamente establecido por la SBS para poder emitirlas.
Sin embargo, otros como el economista peruano especialista en teoría de juegos y profesor de la Universidad George Mason, en Estados Unidos, César Martinelli, concuerdan con la posición de la Federación Peruana de CMAC (FEPCMAC) al afirmar que las observaciones de la SBS y el MEF a la autógrafa de Ley de Fortalecimiento de las Cajas Municipales son un intento muy controlista por parte del Poder Ejecutivo (ver siguiente nota).
Marthans, también director de Economía del PAD de la Universidad de Piura, afirma que esa suerte de posición conservadora respecto a las Cajas Municipales se ha ido rompiendo, tal es así, que una de estas microfinancieras, Caja Cusco, ya puede otorgar tarjetas de crédito tras haber recibido la autorización de la SBS.
Sin embargo, subraya que para que ello haya sucedido, Caja Cusco tuvo que ser muy consciente de los requerimientos que exige el regulador para guardar una buena administración de los fondos que están detrás de este financiamiento, los cuales pertenecen al público.
“Tuvo que mostrar calidad de gestión, disponibilidad operativa, desarrollo de plataformas para canalizar adecuadamente las tarjetas de crédito”, agrega.
Por su parte, Carrillo Acosta, especialista en microfinanzas, menciona que la SBS necesita validar que las Cajas cuenten con la gestión de riesgo adecuada para proteger el dinero de los ahorristas. “No les prohíbe emitir tarjetas, el plástico es un producto particular, requiere una atención especial, tener espaldas financieras para ofrecerlo”, dice.
Considera que puede ser muy riesgoso que la única condición para que una Caja pueda emitir tarjetas de crédito sea que tengan activos superiores a 75.000 Unidades Impositivas Tributarias (UIT), equivalentes a S/345 millones. De no estar preparada para emitir una tarjeta de crédito, pone en riesgo el dinero del ahorrista, podría tener pérdidas, entrar en insolvencia, incluso puede estar propensa a fraude, no solo en perjuicio de sus clientes sino de la misma entidad, añade Carrillo.
El camino de la SBS
Para Marthans, las Cajas que desean la aprobación para emitir tarjetas de crédito deben transitar por el camino de la SBS y demostrar un nivel de suficiencia operativa.
“Años atrás, cuando por primera vez permitimos que las Cajas Municipales entren a trabajar al mercado limeño, no todas ingresaron inmediatamente sino solo las más sólidas del sistema, pero eso constituyó un incentivo para las que no encajaron en primera instancia dieran todo para hacerlo”, expresa.
Bajo la misma lógica, la SBS les pide que hoy transiten por una evaluación, no se les está prohibiendo, por tanto, la observación del Ejecutivo es absolutamente pertinente, asevera.
Por su parte, Carrillo afirma que entre los riesgos más importantes que pueden tener las Cajas está una mala administración tanto en el proceso de otorgamiento de la tarjeta como en el uso del cliente, algo que podría ir en contra de los ahorristas y poner en riesgo su dinero.
“No hay nada en la ley que obligue a entregar tarjetas solo a sus buenos clientes, algunas Cajas responsables probablemente lleven un proceso conservador de colocación y otorguen a usuarios calificados, pero otras buscarían cumplir metas y aprobarían plásticos a desmedro”, advierte.
Además, recuerda que las microfinancieras vienen de un fuerte golpe por la pandemia y están siendo asistidas por el Estado para fortalecer su patrimonio, por lo que en este escenario no es muy apropiado entrar a un negocio riesgoso como es el financiamiento con tarjetas.
“Si se piensa solo en rentabilidad, las tarjetas representan un producto muy atractivo para las entidades financieras porque les generan mayores ganancias, aunque la contraparte es el elevado riesgo, eso es preocupante”, complementa.
Congreso
La Comisión de Economía del Congreso de la República aún no se pronuncia sobre si insistirán en la aprobación de la autógrafa de Ley de fortalecimiento de las CMAC, luego que el Poder Ejecutivo la observó, pese a la consulta realizada por Microfinanzas.
Para Marthans, las Cajas deberían tomar de buena manera la que será la decisión final del Congreso sobre esta propuesta y, a la par, tendrían que interactuar con la SBS para definir los indicadores a cumplir para poder emitir tarjetas de crédito.
“No es algo que se pueda permitir de la noche a la mañana, el texto que reúna estas condiciones debe ser producto de la apuesta de cada lado, Cajas y SBS, e incluir cada aspecto como inversión, recursos, tiempo, afinamiento de plataformas. Eso es lo que busca resguardar el regulador”, acota.