LA ECONOMÍA SE RECUPERA, PERO EL SISTEMA DE MICROFINANZAS SIGUE ENFRENTANDO RETOS Y DESAFÍOS PARA SU FUTURO CRECIMIENTO, DESARROLLO Y SOSTENIBILIDAD
LEYENDA: La sólida rentabilidad del sistema financiero ha permitido a la mayoría de entidades financieras sortear la crisis económica que generó la pandemia y la incertidumbre política, no obstante, mantenerse a flote afectó el desempeño económico de las IMFs (cajas municipales, financieras, cajas rurales y Edpymes), así como inclusive de algunos bancos. Armando Olivares, ex exintendente de microfinanzas de la SBS analiza el segmento y brinda recomendaciones.
De acuerdo a información de la SBS, al concluir el 2021, de un total de 40 IMFs, 17 registraron pérdidas por un total de S/. 250 millones. Al finalizar el 2020 se sumaron 20 IMFs con pérdidas por S/. 432 millones y al cierre del 2019 fueron un total de 11 IMFs con S/. 36.5 millones. El impacto ha sido fuerte y las pérdidas pueden afectar la obtención de recursos privados externos y la confianza en la viabilidad de las IMFs.
“Se puede notar que, hasta la fecha ninguna empresa de microfinanzas ha recuperado su nivel de utilidades y rentabilidad que obtuvieron antes de la pandemia (diciembre de 2019). La economía se viene recuperando y no obstante ello, el sistema de microfinanzas sigue enfrentando retos y desafíos para su futuro crecimiento, desarrollo y sostenibilidad”, comentó Armando Olivares, exintendente de microfinanzas de la SBS.
Como estamos en un mercado fuertemente regulado y para proteger la solvencia y solidez del sistema financiero, a fines del 2021 la SBS emitió una norma regulatoria “endureciendo” la necesidad de realizar mayores provisiones de la cartera reprogramada de los clientes que no hayan pagado para transparentar los estados financieros.
“Los resultados, al 31 de diciembre de 2021, lo vemos reflejado en los estados financieros con 21 IMFs reportando pérdidas por un total de S/. 285 millones. Quizás hubieran sido más empresas de microfinanzas con pérdidas, pero la buena decisión prudencial de algunas IMFs que realizaron provisiones voluntarias en todo el año, las ayudó mucho a cumplir con esta exigencia regulatoria y evitar reportar pérdidas”, apuntó Olivares.
Según información de la SBS, al 31 de diciembre 2021 las 36 instituciones de Microfinanzas (12 cajas municipales, 10 empresas financieras, 6 cajas rurales y 8 Edpymes) gestionan saldos de créditos hasta el 11.7% del total del sistema financiero y en saldos de depósitos, participan hasta el 8.3% de dicho total. En el número de clientes, su participación en mucho mayor que esos porcentajes, ya que destacan por ser “muy inclusivas”.
¿QUÉ DEBEMOS MEJORAR EN LAS MICROFINANZAS?
A diciembre 2021 la economía está retornando a los niveles prepandemia, el negocio y los clientes de microfinanzas sigue creciendo. No obstante, existen algunas IMFs cuyos EEFF reflejan pérdidas, tanto por los resultados de gestión como de los efectos por la aplicación de medidas regulatorias para cubrir mayores exigencias de provisiones de la cartera reprogramada que no han pagado.
Las IMFs vienen realizando grandes esfuerzos de dirección y gestión para impulsar la sostenibilidad y la solvencia de las IMFs. En ese contexto, Armando Olivares recomendó a las entidades microfinancieras realizar las siguientes acciones de mejora:
o Impulsar la inclusión financiera. Aún los indicadores de inclusión financiera o de acceso a los servicios financieros son bajos en el Perú, comparado con otros países de la región y se debería impulsar una mayor inclusión financiera, principalmente en los sectores aún no explorados.
o Cuidar el potencial humano. Es necesario impulsar planes de carrera y de sucesión, con full capacitación a todo nivel, que lleguen a los directores. Es lo más valioso que tiene la empresa para crecer y ser sostenible. El personal desmotivado y no valorado, es fácil que se lo lleve la competencia, con mejores ofertas salariales y mejores oportunidades de desarrollo.
o Fortalecimiento patrimonial para asegurar los futuros planes de crecimiento y sostenibilidad de la empresa. Este es un imperativo que no solo es por exigencia del supervisor, sino por un tema de supervivencia futura y de desarrollo operativo. Las IMFs se desenvuelven en un mercado muy competitivo y con actores con gran fortaleza patrimonial, necesaria para desarrollar planes de desarrollo y de expansión.
o Fortalecer el gobierno corporativo. Como instituciones reguladas, no perder de vista la tendencia de lograr el fortalecimiento de los gobiernos corporativos y los beneficios que conlleva contar con un buen gobierno en las IMFs, no solo como una buena y sana práctica de gobierno, si no para cumplir bien el rol directivo y de gestión que les corresponde y que son indelegables, tanto para los accionistas, directores y gerentes.
o Humanizar la transformación digital. Sin perder la esencia y el contacto humano de las empresas con sus clientes, las IMFs deberían seguir invirtiendo e impulsando la transformación cultural y la transformación digital para competir en mejores condiciones. El sector financiero es el más expuesto a la innovación tecnológica y a la transformación digital. Para ello se requieren recursos importantes a invertir. Este es un imperativo de sobrevivencia, que no deberían perder de vista.
o Estrategia híbrida. Si bien es necesario la aplicación de una mayor tecnología en el sistema financiero, lo digital debe convivir con la presencialidad, considerando la diversidad cultural de la gente que acude al sistema financiero, los bajos niveles de educación financiera y por la naturaleza propia de los clientes de las IMFs (mypes informales).
o Sostenibilidad. Los retos de hoy y del futuro de las microfinanzas es multiplicar esfuerzos para los crecimientos y sostenibilidades del negocio de las IMFs, impulsando la innovación tecnológica y la transformación digital.