ALGUNOS APUNTES PARA EL PERÚ DEL BICENTENARIO
LEYENDA: Jorge Solís Espinoza - Presidente del Directorio de Caja Huancayo, Las próximas elecciones deben ser el punto de encuentro sobre objetivos comunes; de lo contrario, podría significar un salto al vacío.
El año del bicentenario y las circunstancias cruciales que vive el país, nos impone el desafío de construir una visión compartida de futuro “no está la Magdalena para tafetanes”. Esta es la oportunidad de encontrar el punto de inflexión, hacia una sociedad de bienestar. Las próximas elecciones deben ser el punto de encuentro sobre objetivos comunes; de lo contrario, podría significar un salto al vacío.
Son 18 candidatos a la presidencia de la República que se encuentran en carrera con miras a las elecciones del 11 de abril, lo que importa una diversidad de planes de gobierno, con distintas orientaciones y modelos de gestión, muchos diametralmente contrapuestos, cual parodia de la leyenda bíblica de la” torre de babel”, lógicamente son ofertas válidas en democracia; sin embargo, este “mercado persa” expresa la debilidad del sistema.
Algunos ofrecen refundar la República mediante una nueva Constitución, lo que podría ser catártico ante la desesperanza. El Perú no requiere más de ensayos constitucionales, se requiere de voluntad y políticas de Estado, de objetivos en torno a un proyecto histórico nacional, más allá de los quinquenatos de nuestros gobiernos.
Los países no han necesitado de nuevas constituciones para lograr cierto grado de prosperidad, para ejemplarizar, voy a referirme a algunos cercanos a nuestra realidad, en relación con el Índice Global de Desarrollo Humano por Desigualdad, para no usar como métrica PIB (PPA) Per cápita o PIB (nominal) Per cápita. Chile ocupa el puesto 42, tiene 10 textos constitucionales; Uruguay, puesto 57, 6 constituciones, la última vigente desde 1967, fue sometida a 4 enmiendas plebiscitarias, el expresidente socialista José (Pepe) Mujica no necesitó cambiar la Constitución para reducir la pobreza, distribuir mejor la riqueza y conseguir que la economía creciera 75%; Panamá, puesto 67, 4 constituciones, la última de 1972; Costa Rica, puesto 68, su última constitución data de 1949.
El foro natural para lograr consensos es el ACUERDO NACIONAL, su proclama rectora es “definir un rumbo para el desarrollo sostenible del país y afirmar su gobernabilidad democrática”. De los CUATRO EJES TEMATICOS, se debe relievar el eje de EQUIDAD Y JUSTICIA SOCIAL, cuyas políticas son: reducción de la pobreza, acceso a educación pública gratuita y de calidad, acceso universal a los servicios de salud y la seguridad social, acceso al empleo digno y productivo; se debe incorporar inclusión financiera universal como vehículo de formalización, revolución digital-Internet para todos. Es decir, ECONOMIA SOCIAL DEMERCADO INCLUSIVA.