SE REQUIERE REVISAR LAS NUEVAS DISPOSICIONES DE LA SBS QUE LIMITAN Y RESTRINGEN LAS NUEVAS REPROGRAMACIONES PARA UN GRAN SECTOR DE CLIENTES
LEYENDA: Mediante el Oficio N°06302-2021-SBS, el regulador cambia la normativa actual y condiciona la reprogramación unilateral de créditos al cumplimiento de requisitos por parte de los clientes, como el pago de al menos una cuota, y a una ampliación de plazo de 3 meses adicionales como máximo; condiciones que en el actual escenario afectarían en especial a los clientes MYPE de ser sujeto de apoyo en esta modalidad de reprogramación, comentó Wilber Dongo, Gerente Central de Negocios de Caja Arequipa.
—En el último ranking de Merco sobre responsabilidad social y gobierno corporativo nuevamente Caja Arequipa se ubica en el top de las 100 primeras. En comparación con el ranking anterior subieron 11 puestos y se ubican en el puesto 80.
Efectivamente nos sentimos orgullosos y recibimos con mucha humildad este reconocimiento por segundo año consecutivo que nos da la consultora española Merco de España. Como explicaron los representantes de la consultora, este reconocimiento está dada por la evaluación de especialistas empresariales y consumidores, que valoran la gestión de transparencia, su conducta ética, el buen comportamiento corporativo, la responsabilidad con los colaboradores, nuestro compromiso con la sociedad y nuestra contribución a la comunidad.
—En este último ranking Merco incorporó una variable denominada Propósito corporativo que mide la necesidad de la empresa de impulsar una contribución positiva más allá de la generación de beneficios económicos. Esto dentro de la “nueva normalidad”.
Efectivamente uno de los rubros que destacaron es como la población considera el comportamiento de la empresa durante la pandemia. Es la reputación lograda en la población. Es satisfactorio que nos hayan catalogado entre las 80 primeras. Eso significa un fuerte espaldarazo y un reconocimiento a la labor de contribución de Caja Arequipa, cuyo propósito es centrarnos en las personas y que desde un inicio apoyamos a los clientes y a la población en general. Primero con los congelamientos de deudas e intereses, que sabíamos nos iban a afecta financieramente pero entendiendo nuestro rol y que nuestra misión trasciende más allá de este aspecto. El escenario complejo no termina y seguiremos “poniendo el hombro”.
—Al ver el ranking por sectores, en el sector financiero ustedes están en el puesto 5. Nuevamente subieron 2 puestos en comparación al ranking anterior.
Sí. Ahora nuevamente por delante de todas las instituciones financieras salvo los cuatro grandes bancos del país, que tiene un respaldo económico y capital incluso multinacional. Esto nos enorgullece bastante considerando que hace 35 años y con solo 30,000 dólares se fundó Caja Arequipa.
Siempre con esfuerzo propio, porque generamos nuestras utilidades cada año para seguir creciendo, y que incluso 50% de dichas utilidades se destinan para obra social de la ciudad. Tenemos aproximadamente 1.5 millones clientes vigentes, 1.1 millones clientes de ahorros y más de 400 mil clientes de crédito. Un dato importante es que desde hace dos años estamos en todos los departamentos del país.
—Lo hecho por Caja Arequipa y reconocido por Merco evidencia que la buena gestión corporativa no es exclusiva de las grandes corporaciones…
A veces pensamos que las empresas que tienen una propiedad no privada no pueden brindar estándares de alto nivel de servicio. Las cajas, en este caso, Caja Arequipa lo está mostrando por encima de muchas empresas privadas de renombre con patrimonio y socios mucho más fuertes.
Creo que el Estado, el Gobierno y la sociedad en conjunto debería mirar este modelo que ya tiene 35 años con nosotros y que funciona muy bien. Además, cumplen muy bien su función los entes de control como: la SBS, BCR y la Sunat con los controles regulatorios y tributarios e incluso la Contraloría en el control administrativo.
Se tiene que prestar atención al modelo microfinanciero como referente del sector. Es decir, con directores independientes que no sean políticos o designados por ellos, como los tenemos en las cajas, que tengan buena reputación y capacidad profesional. Hay que incorporar gerentes capaces y profesionales que conozcan realmente el sector. Las microfinancieras somos los que estamos mas cerca de la población de menores recursos, los entendemos y apoyamos.
ULTIMAS DISPOSICIONES REQUIEREN REVISION
—Cambiando de tema. En un reciente oficio la SBS ordena cambios en lo relacionado a la reprogramación y refinanciamiento de los créditos. ¿Qué opinión le merece estás nuevas disposiciones dadas por el regulador?
Efectivamente, la superintendencia nos remitió a las entidades financieras el oficio N°06302 en la que entre otras cosas determina que las entidades del sector dejen de hacer reprogramaciones unilaterales a los clientes que no hayan pagado por lo menos una cuota completa (capital, más intereses) en su último programa de pagos, desconociendo los pagos hechos antes de esta última reprogramación y la situación económica individual de cada cliente afectada por el tipo de actividad que realiza. Considero que la medida requiere ser revisada a la brevedad dado el actual escenario incremento de medidas de control de la pandemia, regiones o provincias en cuarentena, cierre de negocios e inamovilidad de personas.
La Superintendencia en el tratamiento de clientes MYPE requiere considerar estas disposiciones, modificando o prorrogando su implementación. Se olvida que los negocios considerados dentro de las denominadas fase 3 y 4 de la reactivación no han llegado a abrir o lo han hecho parcialmente, entonces si no han trabajado adecuadamente en 11 meses, obviamente no generaron ingresos suficientes para afrontar sus compromisos y ahora, en un contexto aún más difícil, se les pide que realice al menos un pago de su cuota del crédito, para acceder a una nueva reprogramación a pesar de la voluntad que han manifestado muchos de ellos.
—¿Qué otras restricciones se dan?
Falta aclarar algunas tipologías de pago por los clientes. Por ejemplo, un cliente reactivó su negocio en agosto y cumplió con el pago de sus créditos en agosto, setiembre y octubre, pero en los meses siguientes dejó de pagar por nuevas medidas restrictivas a su negocio y se acogió a una nueva reprogramación. En el oficio de la SBS dice que si el cliente no pagó ninguna cuota de su última reprogramación no se le ayudará.
Entendemos el rol de control de la SBS sobre el tratamiento especial que se está dando a este tipo de operaciones, pero lo importante es no perjudicar a los clientes en pleno estado de emergencia porque en muchos casos dicha situación, se debe al efecto de las medidas gubernamentales.
—Dicho oficio en su punto 2 también menciona que de aprobarse cambios a los créditos, el cronograma de pagos solo puede extenderse tres meses adicionales, respecto al último cronograma ¿Cuál es su opinión?
Eso también es limitante. La SBS con dicha disposición desconoce las actividades de cada cliente en particular que tiene reprogramación, por ende, no puede implementar disposiciones generales. Las realidades de los microempresarios son distintas. Por ejemplo, el dueño de una bodega que ha estado funcionando, tal vez al 50 o 70% de su capacidad, pueda asumir sus pagos en esos tres meses de extensión, pero los que laboran en el sector turismo o anexos como restaurantes, no podrán, lo mismo actividades como los gimnasios y otros. Fijar tres meses más al cronograma adicional es condenar a desaparecer a ese negocio. Los plazos de pago para este tipo de reprogramaciones, se establecen en base a la actual y futura capacidad de pago de los clientes y esto parece que no ha sido considerado en esta norma.
Además, dicho numeral 2 dice qué si las entidades financieras reprograman con esta modalidad, se deja de reconocer contablemente como ingreso devengado, debiendo reconocerse mediante el método de lo percibido. Este cambio también ya está afectando la situación financiera de las microfinancieras.
—Mientras que el Gobierno anuncia programas de ayuda para las Mype, la SBS pone restricciones para ayudar a los microempresarios ¿No están coordinando?
Evidentemente se percibe que no hay una sola línea en las políticas. Por una parte, se tiene al Gobierno anunciando la creación de PAE Mype con un fondo de S/ 2,000 millones para otorgar créditos a las microempresas; reconociendo que es el sector más afectado por la crisis sanitaria y por otra parte, está la SBS con la emisión de las medidas ya comentadas.
Entonces invoco a que la SBS pueda revisar esta disposición que tiene fines regulatorios para todo el sistema, pero dados los efectos de esta segunda ola, han cambiado el comportamiento de pago de los clientes, la realidad es otra y esta realidad nos pide ayudar a los microempresarios que están necesitando reactivarse y sostener a sus familias.
Es momento de darle facilidades de pago a los microempresarios, de lo contrario van camino a caer en morosidad, desmejoraran su calificación crediticia que les impedirá posteriormente acceder a un financiamiento de dinero y comercial.
—Aproximadamente el 50% de la cartera de créditos del sistema financiero fueron reprogramados de manera masiva porque los clientes no podían apersonarse con las entidades o porque entendieron que las disposiciones del Gobierno al inicio de la pandemia automáticamente les otorgaba periodos de gracias
Correcto. La SBS conoce dicha información y publicó que en el mes de junio fue el pico más alto de reprogramados con el 71% de la cartera en todas las Cajas. Hoy está menos del 35% en promedio, ósea más de la mitad ya se puso al día, pero a ese 35% restante no está ayudando a pesar que cada mes se va decreciendo en este ratio.
Es importante también mencionar recién se viene implementando el programa denominado Reprograma Perú (ley 31050), con garantías del estado, cuyo objetivo es ayudar a los clientes con negocios que más han sido afectados, pero que el oficio de la SBS no se ha contemplado esta situación en su contenido.
INDICADORES DE CIERRE 2020
—Cuénteme un poco sobre los indicadores financieros de Caja Arequipa ¿cómo cerró el 2020?
La situación ha sido muy difícil, sin embargo, hicimos todo el esfuerzo posible para salir adelante. Parte del reconocimiento de Merco ha sido que la gente valoró todo el trabajo que hicimos a favor de la comunidad. Primero dimos sostenibilidad al 100% de nuestro personal; cerramos el 2020, con S/ 35 millones de utilidad, somos la caja con mayor utilidad, pero muy lejos de los S/ 138 millones que hicimos el año anterior.
Si uno compara en ratios de morosidad, hemos tenido una mora contable menor que la del año pasado. El 2020 terminamos con una morosidad en 3.2, mientras que el 2019 cerramos con 4.7. En esta nueva normalidad hay que entender la capacidad de pago del cliente. Ahora estamos haciendo un trabajo acelerado de digitalización, de inteligencia de datos que nos permita acercarnos a los clientes sin necesidad de que las oficinas sean el único punto de contacto.
Dentro del sistema financiero, incluido bancos y financieras, somos la segunda o tercera institución con mayor porcentaje de cobertura de provisiones de esta mora (324%). Eso implica que incluso que toda la mora acumulada hoy que no se pague nada, podemos absorber tres veces más ese mismo volumen de morosidad. Destacar además que la Caja ha hecho provisiones voluntarias por más de S/ 120 millones el año pasado.